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Reportaje:

Los Lakers chocan con Boozer

El 'pívot' de Utah iguala el récord de 22 rebotes de Malone y Kobe falla un triple decisivo

Robert Álvarez

"Les hemos atacado un poco más en lugar de dejarles hacer lo que querían cada vez". Jerry Sloan, el veterano entrenador de Utah Jazz, explicó de esta manera la victoria de su equipo sobre los Lakers (88-86). El equipo de Los Ángeles estaba sobre aviso. Ganó los dos primeros partidos en su cancha, pero en los dos estuvo a punto de perder ventajas de 22 y 20 puntos. En el tercero, en Salt Lake City, consiguió abrir una brecha de 13 puntos en el tercer cuarto y logró entrar en el último con ocho puntos de ventaja. Pero acabó imponiéndose la mayor intensidad y acierto en el rebote de los Jazz. Nada menos que 15 rebotes capturaron en ese periodo, con Carlos Boozer a la cabeza, hasta el punto de que igualó el récord reboteador de la franquicia en poder del legendario Karl Malone, con 22 capturas en total. Boozer además anotó 23 puntos y dejó la eliminatoria 2-1 para los Lakers.

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"Después de los dos primeros partidos, en los que le pudimos frenar, demostró que es un gran jugador. La principal diferencia estuvo en el rebote. Además, han encontrado posiciones de tiro fáciles, con gente siempre muy abierta para anotar con comodidad", analizó Pau Gasol, que fue uno de los pocos en el equipo de Phil Jackson que, con 20 puntos y nueve rebotes, alcanzó sus promedios.

Los Lakers sufrieron dos problemas esenciales: el mal partido de Andrew Bynum, que sólo jugó siete minutos debido a la rápida acumulación de faltas, y los malos porcentajes de Kobe Bryant, que anotó 18 puntos pero con una nefasta serie de cinco canastas en 24 lanzamientos. "Simplemente, no pude lanzar bien", se excusó. "Ellos utilizaron una defensa mixta con muchas ayudas y no pude realizar un buen trabajo en el intento de buscar ventaja para lanzar". Además, Kobe falló el triple sobre la bocina que lo hubiera cambiado todo, después de que Deron Williams, a dos segundos para el final, anotara la canasta que estableció el 88-86. "Hicimos mal las cosas al final", admite Pau. "Ellos estuvieron muy físicos y sólo concedieron unas pocas penetraciones en todo el partido".

"Sus reservas nos hicieron mucho daño", lamentó Phil Jackson en relación a la efectividad de Korver y Harpring. Odom fue el único reserva que estuvo a la altura en Los Lakers, con 21 puntos y 14 rebotes, pero entre Brown, Vujacic, Walton y Powell sólo sumaron siete puntos. La derrota hurga en la herida de los Lakers, que ya fueron incapaces de ganar en Salt Lake City en el play off que también le enfrentó a Utah la pasada temporada, con el agravante de que esta vez el equipo de Sloan no puede contar con el pívot turco Mehmet Okur, su segundo mejor anotador, debido a una lesión.

Mientras que Pau batalla en los play offs, su hermano Marc ya se encuentra en Barcelona disfrutando de sus vacaciones tras su primer curso en la NBA con los Grizzlies, donde ha promediado 11,9 puntos y 7,40 rebotes. "No me arrepiento de haber ido. Hemos ido de menos a más y hay que mantener la columna vertebral del equipo para intentar luchar por los play offs". ¿Y la llegada de Ricky Rubio? "En la NBA hay un boom con Ricky. Todo el mundo pregunta por él. Es espectacular".

Gasol y Kobe Bryant, en el partido contra Utah.
Gasol y Kobe Bryant, en el partido contra Utah.EFE

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Sobre la firma

Robert Álvarez
Licenciado en Periodismo por la Autónoma de Barcelona, se incorporó a EL PAÍS en 1988. Anteriormente trabajó en La Hoja del Lunes, El Noticiero Universal y el diari Avui.

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