Umbrales para cambiar la realidad

Una puerta puede ser una metáfora. Una puerta puede significar apertura. Una vía para conocer realidades como la pobreza y la desigualdad en el mundo. La exposición Puertas: la vida que llevamos; el mundo que queremos usa este elemento como vehículo para mostrar al espectador una visión artística, crítica y cruda de los mecanismos que hacen posible que conviva una minoría de países ricos con una inmensa mayoría de naciones pobres.

La muestra está organizada por la Plataforma 2015 y Más, formada por 15 ONG que defienden una globalización alternativa a la actual, y plantea un reparto igualitario de la riqueza. La exposición está producida por la empresa Cipó. La financiación corre a cargo de diversas administraciones de cooperación, además de las diputaciones y ayuntamientos de las ciudades por las que se mueve la exhibición.

Un total de 46 puertas, 22 vídeos y proyecciones, sonidos direccionales, olores, carteles... Todo ello compone el complejo de la exposición de 500 metros cuadrados. Los elementos se distribuyen en un recorrido que componen cuatro mundos. El mundo feliz en el que viven los países desarrollados y basado en un alto consumo. El mundo real, diverso y complejo, en el que todo está interrelacionado. El mundo de los falsos remedios que se aplican para luchar contra la pobreza sin proponerse plantearse sus causas reales. Y, por último, el mundo posible, que plantea un cambio de políticas y de conciencia social.

"No es utópico decir que se puede acabar con la pobreza. Es una pena la falta de compromiso de quienes toman las decisiones, multinacionales y dirigentes políticos", se queja Corina Mora, responsable de Comunicación de la Plataforma 2015 y Más. El presidente de la Fundación Cajasur, José Rafael Rich, destaca que esta exposición forma parte de una apuesta de la entidad financiera por la mentalización de la ciudadanía en temas medioambientales y sociales para fomentar un mundo más habitable.