La cárcel de preventivos tendrá 1.200 presos, el doble de los previstos

Cambio de planes por el aumento imparable de la población reclusa. La cárcel de Barcelona de preventivos que sustituirá a la Modelo albergará finalmente 1.200 reclusos, más del doble de los 500 que se habían previsto cuando se programó hace tres años y que unos meses después se fijó en 750. La fecha de apertura también se ha ido modificando y si hace ahora dos años se dijo que sería en 2010, ahora se ha fijado para 2013.

La consejera de Justicia, Montserrat Tura, y el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, zanjaron ayer en público las discrepancias que han mantenido ambas administraciones desde hace años sobre el futuro de la Modelo y su emplazamiento, que será entre las calles 5, 6 y D de la Zona Franca. Muy cerca se situará el final de un ramal de la línea 9 del metro.

La nueva cárcel costará 113 millones de euros y se construirá por el sistema del derecho de superficie, similar al de una hipoteca, en este caso a 30 años. Hasta entonces, la Generalitat no tendrá la propiedad del equipamiento. En la prisión habrá seis módulos de hombres, dos de mujeres y uno de jóvenes, todos preventivos.

En unos terrenos todavía por concretar, pero cercanos a esta cárcel, se construirá un centro en régimen abierto que supondrá el cierre definitivo de la cárcel de la Trinitat. El Ayuntamiento se encargará de negociar con el Consorcio de la Zona Franca en qué terrenos se ubicará, pero se sabe que tendrá 5.000 metros cuadrados.

El Consistorio y la Generalitat también firmaron ayer dos convenios para resituar diversos edificios judiciales. En el que actualmente están los juzgados de instrucción y penales, al final del paseo de Lluís Companys, se ha previsto aumentar la edificabilidad de 30.000 a 45.000 metros cuadrados. Allí irá la Audiencia de Barcelona y los juzgados de lo contencioso-administrativo y social, ahora dispersos en tres edificios valorados en 40 millones de euros y propiedad de la Generalitat.

En los terrenos que ocupa la cárcel de mujeres de Wad-Ras se construirá la sede del Departamento de Justicia, que costará 38 millones, y que ahora está dispersa en dos edificios, también de la Generalitat, además de un centro de régimen abierto.