Un teatro público
Patricio Urquizu se declaró ayer "un estudioso de lo viejo", de manera que dejó en manos de Aizpea Goenaga el capítulo de los retos actuales del teatro vasco. "Hay una asignatura pendiente, que es hacer un teatro público que pueda sostener la creación desde la base, que es la literatura dramática, hasta la representación de las obras", expuso la actriz y dramaturga donostiarra.
En su opinión, en Euskadi se va "muy por libre" tanto en la publicación como en la creación. "Hay mucho trabajo que hacer", entre otras cosas "con la oralidad en euskera dentro del teatro". "Son asignaturas que no podemos abarcar individualmente", insistió Goenaga, a quien le gustaría que existiera "un mayor colchón y holgura para poder trabajar distintos aspectos".
"El teatro popular, el teatro clásico rescatable... hay un filón. Y somos muy analfabetos sobre nuestro propio teatro y nuestra propia historia", subrayó la actriz ante de añadir que el único modo de conocer mejor esas materias es dedicándoles tiempo, sin que los profesionales tengan que estar tan pendiente de "subsistir".
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