Boluda y el 'plan Obama'

Probablemente, Vicente Boluda nunca se habría imaginado que ser presidente del Madrid no sólo es hacerse un par de fotos, firmar autógrafos, lanzar pronósticos equivocados y vacilar al Barcelona. En los dos últimos meses, cada vez que le preguntaban si se había arrepentido de haber sustituido a Ramón Calderón contestaba que un poco sí: "Es duro, pero no voy a dar marcha atrás ahora". El martes, tras la derrota en Anfield (4-0), varios aficionados le pidieron en el aeropuerto de Liverpool que convocara elecciones y dimitiera de una vez. Boluda dio largas mientras Amador Suárez, el más exaltado de los miembros de la junta, gritaba: "¡No insultéis!".

Ahora, Boluda no puede agarrarse al discurso del "por el bien del equipo", porque el equipo no se ha clasificado para cuartos por quinto año seguido. Tampoco puede seguir alargando la convocatoria de elecciones. Ayer mismo por la tarde, el presidente dio su brazo a torcer en una reunión con Eduardo Fernández, presidente de la plataforma Ética Madridista (1.300 socios y 600 compromisarios) y aceptó un orden del día para la asamblea del 29 de marzo que recoge la creación de una nueva comisión de disciplina social, una nueva junta electoral y la convocatoria de elecciones como muy tarde la primera semana de junio. A cambio, Ética Madridista le dará su apoyo.

Ética Madridista le ratificará si convoca a las urnas a principios de junio como muy tarde

Fue la solución de emergencia de Boluda después de la bofetada que recibió por la mañana del otro brazo de la oposición, Eugenio Martínez (1.000 socios, 150 compromisarios), quien le aseguró que no iba a ratificarle. Martínez le había propuesto otra vía para salir del paso. "Le he dicho que se plantee la opción Obama. Fue elegido en noviembre pero no asumió el cargo hasta enero. Boluda podría convocar elecciones el 24 de mayo, dejar trabajar al presidente electo en la política deportiva hasta que asuma oficialmente el cargo el 1 de julio con las cuentas ya aprobadas", explica Eugenio Martínez. "La derrota en Anfield ha cerrado un ciclo que debe sellarse con su salida. Boluda representa una etapa que ya no tiene que existir".

El presidente consideraba inviable unas elecciones antes de julio por razones administrativas: "Hay que dejar las cuentas cerradas", argumentaba. Pero, según un abogado que fue directivo del club, esa justificación no tiene base jurídica. "No hay ninguna norma que diga que las cuentas se deben cerrar el 30 de junio. Es más, se pueden avalar sobre el último presupuesto aprobado, el de 2007. Si Boluda se agarra a eso es que oculta algo", afirma.

El naviero, sin apoyos ni argumentos, ha ganado tiempo. Que tenga un final lo menos volcánico posible en la presidencia depende de él. Si en el orden del día decide finalmente incluir una fecha de elecciones anticipadas (presumiblemente junio), tal y como accedió ayer ante Ética Madridista, la junta podría ese mismo día nombrar un presidente interino hasta la cita electoral. Si no lo hace, la junta podría elegir a otro presidente y convocar otra asamblea para que lo ratifiquen.

En la última cita con los compromisarios se colaron, además de no socios, centenares de Ultras Sur. Boluda fue quien luego condenó su presencia. Pero de las 2.000 entradas para Anfield sorteadas entre los socios, 240 (más del 10%) fueron al grupo radical.