"No entendemos por qué tiene que haber un cambio de 'lehendakari"

La portavoz del Gobierno vasco en funciones, Miren Azkarate, y el presidente del PNV, Iñigo Urkullu, armonizaron ayer el lamento nacionalista por el serio riesgo que corre Juan José Ibarretxe de no seguir al frente del Gobierno vasco habida cuenta de que PSE (25), PP (13) y UPyD (1) tienen asegurada la mayoría absoluta tras las elecciones del 1-M. Azkarate, de hecho, en su comparecencia para informar sobre los acuerdos del tripartito admitió: "No entendemos por qué tiene que haber un cambio de lehendakari". Mientras, el presidente del EBB descartó que "Ibarretxe pueda ser sacrificado" al tiempo que se niega a admitir que el PNV "se vea desplazado" por el PSE.

Azkarate recordó que hablaba sólo en nombre del lehendakari, de quien dijo que "ha ganado las elecciones con contundencia y con holgura". De ahí que defienda la legitimidad de Ibarretxe para tomar la iniciativa de hablar con todos los partidos con representación parlamentaria "para alcanzar los acuerdos que sea posible tomar". En esa línea eludió valorar los resultados del resto de partidos del actual Gobierno vasco porque entiende que "corresponde a cada uno de ellos".

El PNV advierte de "una inestabilidad constitucional" si es investido López

"Si los socialistas aceptan el apoyo del PP, les dan el triunfo en España"

Eso sí, también transmitió el propósito de Ibarretxe de que "el Gobierno vasco en funciones seguirá trabajando cada día tomando las decisiones más adecuadas para sacar adelante el país" hasta la constitución del nuevo. Azkarate no desperdició la ocasión para recordar que Ibarretxe "ha sabido dar estabilidad a la sociedad, con una gestión que ha llevado al País Vasco a estar en los grados de bienestar actuales, sufriendo las consecuencias de la crisis, pero en una situación mejor que en su entorno".

Para Urkullu, tampoco existe ninguna duda sobre la "legitimidad" de Ibarretxe para formar el futuro Gobierno vasco habida cuenta de que el PNV "ha sido el ganador". Además, el presidente del EBB advierte de la "inestabilidad constitucional" que provocaría la llegada del socialista Patxi López a la Lehendakaritza con el respaldo del PP ya que "no sería gratuito" en alusión al posible cambio de manos de la Diputación de Álava y el Ayuntamiento de Getxo, ahora en poder jeltzale.

De cara a las futuras conversaciones con el resto de fuerzas del arco parlamentario, Urkullu dejó bien claro que "no sacrificará la cabeza de Ibarretxe" como se ha venido rumoreando ante la posibilidad de que sirviera para acercar posturas en una hipotética vía de acuerdo con los socialistas.

"Cómo pretende el PSE-EE plantear una fórmula de Gobierno en la que dé la impresión el PSE de que ha ganado las elecciones cuando no lo ha sido, cuando eso es una mentira?", se preguntó Urkullu en una entrevista matinal a Radio Euskadi. Quizá por eso emplazó a los socialistas a reconocer "públicamente" que el "ganador de las elecciones autonómicas vascas es el PNV". Ocurre que a fecha de hoy, el PSE no se ha dirigido de modo oficial al PNV para mostrarle su felicitación por el triunfo, confirmando así la complicada relación existente entre ambas formaciones a nivel del País Vasco.

Urkullu aprovechó este análisis para reclamar de la sociedad una "reflexión" sobre el planteamiento que esgrime su partido basado en "prepararnos para el futuro, para ubicar a Euskadi en el mundo, en unos índices de desarrollo humano", sin olvidarse de "profundizar en el autogobierno" y en "trabajar en la paz".

Frente a ello, el presidente del EBB recuerda el planteamiento que tenía el PSE-EE, junto con el del PP, "de un cambio sin ningún contenido por detrás de buscar un castigo a Ibarretxe, que no se ha visto refrendado por parte de la sociedad", recordó. Así, advirtió de que "el PP se está ofreciendo al PSE no de una manera gratuita, porque no es a cambio de nada". Urkullu dice ver "un silencio cómplice" de los socialistas ante ese ofrecimiento. "Que la sociedad se dé cuenta del juego de lenguajes que utilizan el PSE-EE, el PSOE y el PP, la mentira en la que pretenden instalar a la sociedad vasca, con el apoyo de determinados grupos mediáticos", añadió.

Como primera conclusión, Urkullu recuerda al PSE-EE que "sea consciente" de que si acepta el apoyo del PP para su investidura como lehendakari, "está dando el triunfo a los populares en España".

De cara a las conversaciones de mañana con el PSE, el dirigente nacionalista adelantó que les trasladará que "su discurso de cambio no ha tenido ningún éxito en las elecciones, que es un discurso frentista, que el apoyo del PP no es a cambio de nada, que el partido ganador es el PNV con cinco o seis escaños más y que hay más de 80.000 votos de diferencia".

Finalmente, de cara a la posible ruptura del apoyo al Gobierno Zapatero, Urkullu dijo que "tomará cartas en el asunto" si se ve "desplazado" de la responsabilidad del Ejecutivo vasco "por la cerrazón" del PSE-EE, aunque avanzó que "primero hay que ser honesto con la sociedad vasca, las consecuencias en el Estado se verán después".