Triunfo de la sociedad civil

El martes pasado declaré en los Juzgados de Madrid junto a 59 compañeras y compañeros. En el 2000 habíamos organizado, sin dinero y con el esfuerzo de 20.000 activistas, un referéndum popular contra la deuda externa que consiguió más de un millón de votos en todo el Estado. El 96% de los votantes pidieron la abolición de la deuda externa que permite al Estado español ingresar de los países empobrecidos un 0,8% del PIB español, mientras que la ayuda al desarrollo ronda el 0,3%, lejos del 0,7% exigido desde 1971 en la ONU.

Y es inmoral que un país como el nuestro tenga una balanza favorable en su relación con los países que han sido víctimas del colonialismo pasado y del neocolonialismo actual. Todo esto pide una reflexión en profundidad de las estructuras y dinámicas internacionales.

Pero como el Gobierno del PP entonces (y el del PSOE en la actualidad) no escuchaban esta corriente de opinión muy extendida a la sociedad española, nos manifestamos, acabando con una sentada pacífica a las escaleras del Congreso de los Diputados que fue reprimida con injustificada violencia extrema por parte de la Policía Nacional. Ocho años después se juzga a cinco policías y, como precedente inédito, a dos de ellos, oficiales de policía, se les acusa por haber ordenado la carga. Aun cuando posiblemente serán absueltos de la condena, la acusación es muy importante porque nunca se habían cuestionado las órdenes, sólo las maneras de algunos antidisturbios. Esto disminuye la impunidad con la que actúan los jefes antidisturbios.

Desgraciadamente para la democracia de nuestro país, los medios de comunicación han escondido la noticia a la ciudadanía. Unos medios, porque responden a los intereses del PP, que tuvo responsabilidad en aquellos hechos, y los otros medios, porque responden al PSOE que no quieren cuestionar a la policía que ahora comandan ellos.