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Elecciones 1-M

Euskadi, sin gurús electorales

Sólo el PP ha contratado a un gabinete externo para su campaña - El PNV y el PSE afirman que se orientan con medios estrictamente internos

Eso dicen los partidos vascos: que en Euskadi no hay gurús electorales de los que llevan en volandas al triunfo a los políticos en otras latitudes. Los profesionales en asesoría de estrategia y comunicación política relativizan tal negativa. Lo cierto es que de todas las formaciones que se presentan a las elecciones sólo el PP reconoce haber contratado a un gabinete de asesoría integral en estrategia y comunicación política y electoral.

Tanto el PNV como el PSE aseguran hacerlo todo con medios propios -este último partido internalizó esa asesoría, según fuentes de otras formaciones- más la traducción de sus ideas que les hacen agencias de publicidad. Para ellas piden todos la reserva por razón de sus otros compromisos profesionales ajenos a la política.

El PSE cuenta con apoyo de la agencia Sra. Rushmore, que hizo la campaña de Zapatero

"Eso se irá imponiendo" admite Joseba Aurrekoetxea, el jefe de campaña del PNV, en referencia a las asesorías integrales. "Nosotros lo hemos evaluado; se ha pensado en muchas campañas, pero no lo hemos llegado a hacer. Aún hay pocas consultorías políticas en Euskadi y, además de saber hacer campañas, hay que conocer el país. No sirve traerse a un americano por muy bien que lo haga allí". Así que el gurú del PNV es en parte el propio Aurrekoetxea, un habitual de las jornadas especializadas que organizan empresas o embajadas. Un par de veces ha viajado a Estados Unidos en busca de ideas y técnicas, pero hay algo que nadie suple: "El olfato político; eso hay que tenerlo y lo dan los años en política, como el conocimiento del terreno". "No todo es analistas y sociólogos", agrega, ante cuya "profesionalidad y modernidad" muestran respeto los asesores de otros partidos.

El PNV tiene un equipo bien engrasado, que Aurrekoetxea dirige desde las generales de 2004, y los nombres de cuyos componentes no quiere precisar. En esta ocasión ha partido de un completo estudio, encargado tras la derrota en marzo de 2008 ante el PSE a seis profesionales, todos ellos miembros del partido, sobre las posiciones del PNV. La percepción social no era buena: un partido "cansado" y con problemas internos eran lo peor de la foto. Se aplicaron a las indicaciones de sus estudiosos y el resto es conocido. El PNV tiene una tarea más que el resto: el ensamblaje con el equipo del lehendakari.

El homólogo de Aurrekoetxea en el PSE es Rodolfo Ares, que trabaja en el área electoral desde 1980. Se reúne habitualmente una vez al mes con entre 15 y 20 personas ajenas al partido. "Sólo se les pide que sean absolutamente sinceras". Lo único que el PSE hace fuera es la publicidad, esta vez con un apoyo añadido: la agencia Sra. Rushmore, que ideó la última campaña de Zapatero. El comité estratégico y el de campaña son totalmente domésticos, asegura. Tanto, que en ese equipo "muy entrenado" figura, también desde hace muchos años, la propia esposa del candidato, Begoña Gil. Jesús Eguiguren, Patxi López, Isabel Celaá a cargo del programa, y en ocasiones el sociólogo Víctor Urrutia han sido el núcleo duro. Alrededor, un equipo de una docena de personas del partido y otros siete u ocho asesores externos. En estas elecciones, "hay mucha gente de muchas áreas haciendo papeles sobre los que Patxi reescribe", pero cuyos nombres son tabú.

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Igualmente en secreto se guarda el del gurú, éste sí reconocido, del PP vasco. Su secretario general, Iñaki Oyarzábal, es el director de campaña y asumía un trabajo con dificultades: hacer percibir "el nuevo PP". Recurrió a un gabinete de asesoría política integral que zanjó el primer problema, su poco conocido candidato, Antonio Basagoiti, con su foto de niño queriendo ser lehendakari. Siguieron el resto de las acciones, que han dado la vuelta como a un calcetín al dramatismo del mensaje y la imagen del PP anterior, siempre al servicio de los tres o cuatro ejes de campaña, fijados por sus dirigentes. Leopoldo Barreda, Laura Garrido, Antón Damborenea y Esther Martínez son personas clave en el equipo.

Militancia y calle

La decisión de no recurrir a complejas asesorías externas sí se correponde con la realidad de los partidos pequeños: no las pueden pagar. Se conforman con las aportaciones voluntarias de militantes o simpatizantes que profesionalmente rozan los conocimientos requeridos y están dispuestos a dedicarles un poco de tiempo sin ganar dinero. Sólo EA ha echado mano, antes de la campaña, a dos asesorías, una vasca y otra catalana, a la que accedieron a través de sus relaciones con ERC. "Te pueden ayudar a ordenar ideas, pero en política no hay grandes trucos. Al final eres tú mismo", dice Mikel Irujo, responsable de su campaña con Elisa Sáinz de Murieta.

En EB, su director, Serafín Llamas, lleva "con orgullo" el equipo propio, "sin grandes asesores, ni americanos ni de Madrid" y el trabajo de sus afiliados en la calle. También la calle y la militancia son la modesta base en la que se apoya Marijo Deogracias, la jefa de campaña de Aralar.

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