El Consell anuncia otros 1.020 millones para los municipios

Gerardo Camps, vicepresidente económico del Consell, se sacó ayer de la chistera 1.020 millones de euros para financiar inversiones municipales y dotar el tercer plan de impulso económico que persigue atajar los efectos de la crisis económica que presenta la Generalitat en el plazo de tres semanas. El consejero de Hacienda evitó precisar si tiene previsto modificar la previsión de cerrar el ejercicio presupuestario de 2009 con un 1% de déficit. Solo reiteró que el plan de impulso de la inversión municipal será dotado con fondos extraordinarios ajenos al presupuesto corriente. Su esperanza sigue siendo arrancar un buen paquete de los fondos adicionales que aporte el Estado cuando se cierre las negociaciones del nuevo modelo de financiación autonómica. "El Consejo de Política Fiscal y Financiera está convocado a mediados de febrero, entonces veremos si debemos revisar el déficit, o no".

El Consell llegó a distribuir hace apenas dos meses todos los fondos adicionales que pudiera ingresar la Generalitat como resultado del nuevo modelo de financiación entre los servicios de Sanidad y Educación y la aplicación de la ley de dependencia. "Políticas sociales", sintetizó ayer el vicepresidente económico, "no hay política más social que el empleo".

El nuevo plan se suma a los recientes proyectos de apoyo al empleo, anunciado la primera semana de enero y dotado con 361 millones de euros, y de apoyo a los sectores productivos, anunciado hace una semana y dotado con otros 335 millones de euros. Hasta la fecha, los tres planes implican un compromiso de gasto de parte de la Generalitat que asciende ya a 1.716 millones de euros.

El plan de inversión municipal es bianual. "La Generalitat pondrá sobre la mesa 1.020 millones para financiar aquellos proyectos que los ayuntamientos formulen hasta enero de 2011". "No dispondremos de 510 millones para cada año, sino que daremos tiempo a los ayuntamientos para que puedan elaborar nuevos proyectos", explicó Camps.

Las inversiones a financiar deberían redundar en la competitividad de los municipios afectados. Mejorar sus accesos viarios, urbanizar suelo industrial o conservar parajes deteriorados, por ejemplo.

El fondo se distribuirá por habitante, 203 euros por vecino, la misma fórmula a la que recurrió el Gobierno central cuando diseñó las ayudas cuya solicitud se agotaba ayer.

El vicepresidente económico aseguró que no se primará la contratación de personas sin empleo. "Pretendemos más mantener que crear empleo".

Rita Barberá, alcaldesa de Valencia, se apresuró a celebrar la inyección de 166 millones que podrá recibir la ciudad. El fondo estatal que impulso el Gobierno central hace dos meses y que representa inversiones por 141 millones para la ciudad de Valencia fue recibido por Barberá como "una medida paliativa". La iniciativa del Consell, sin embargo, permitirá "cambiar el perfil de determinados barrios de Valencia", esencialmente el Cabanyal y, en menor medida, Russafa.

Elena Bastidas, presidenta de la Federación Valenciana de Municipios y Provincias y alcaldesa de Alzira por el PP, también aplaudió el nuevo fondo: "Esta inyección nos permitirá realizar propósitos que de otro modo serían imposible y permite tiempo suficiente para presentar y ejecutar los proyectos de modo que ningún municipio se quede sin ayuda".

Gerardo Camps explicará el miércoles ante el pleno de las Cortes el detalle de los proyectos incluidos en sus iniciativas de impulso económico y anunció que las completará con un nuevo fondo destinado a favorecer la financiación de pequeñas empresas.

El cuarto plan en un mes será "similar" al acuerdo alcanzado en noviembre pasado entre varias entidades financieras y el Instituto Valenciano de Finanzas para distribuir fondos a pequeñas empresas.