El derroche de luz perjudica a los insectos de L'Albufera

La contaminación lumínica urbana afecta directamente al vuelo, la navegación y la visión de los insectos, cuyos ciclos reproductivos también se ven desequilibrados por la excesiva potencia de luz eléctrica y cuya mortandad aumenta por la "llamada" masiva que realizan sobre sus propios depredadores. Así lo asegura un estudio presentado ayer por el Instituto Cavanilles de Biodiversidad y Biología Evolutiva de la Universitat de València, en el que durante este año se ha empleado un nuevo método digital para medir la incidencia del derroche de luz sobre la población de insectos del parque natural de L'Albufera.

Según el profesor de Zoología de la UV Joaquim Baixeras y el investigador Guillermo Fernández, la contaminación lumínica -que hace que los ciudadanos vean solo 200 de las 7.500 estrellas posibles- provoca que los insectos, el grupo animal más abundante de la Tierra, vean directamente alterado su ecosistema. Los efectos comprobados señalan que una mariposa expuesta durante diez minutos a un foco de luz (una bombilla) tardará al menos media hora en recuperar su sensibilidad visual. La contaminación lumínica también afecta al sistema de orientación de los insectos (que suelen guiarse por la luz lunar) y a su capacidad de reproducción, al disminuir la cantidad tanto de huevos en cada puesta como de feromonas y de predisposición al apareamiento.