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El PP rechaza todas las ofertas de pacto del PSOE en Estepona

El alcalde apela a la "excepcionalidad" de la situación para pedir apoyos

El PP no va a prestar ningún tipo de ayuda al PSOE para sacar adelante la delicadísima situación del Ayuntamiento de Estepona. Más o menos se sabía, pero lo que hasta ahora eran declaraciones inscritas en el rifirrafe político, fue elevado a carácter de posición oficial del partido.

Apenas ocho horas después de que el secretario general del PSOE de Málaga, Miguel Ángel Heredia, y el alcalde de Estepona, David Valadez, anunciaran una propuesta formal al PP de incorporarse al gobierno municipal, y en su defecto, de pactar un decálogo de asuntos de interés estratégico para el municipio, la permanente de la ejecutiva provincial del PP se reunió con carácter extraordinario para rechazar el ofrecimiento. "El PP no va a servir de coartada al PSOE de Estepona y no va a ser cómplice de un gobierno bajo sospecha de corrupción", afirmó el presidente del PP malagueño, Elías Bendodo.

Los populares dicen que no quieren ser cómplices de un gobierno sospechoso

La deferencia del PP con la propuesta socialista se limitó a la escenificación de la respuesta, con la convocatoria urgente de la permanente, pero en el fondo del discurso no hay ninguna reconsideración. Palo y tentetieso. "Los acusados de presunta corrupción nos invitan a que entremos en el sitio donde supuestamente han cometido los hechos delictivos con el compromiso de que no lo harán más. No nos lo creemos", explicó Bendodo. El PP insiste que la única solución que cabe en Estepona es la disolución de la corporación municipal y la convocatoria de elecciones municipales extraordinarias.

El secretario provincial del PSOE de Málaga había explicado por la mañana que ante la posición del PP de rechazar integrarse en el equipo de gobierno, se le ofrecía un pacto puntual sobre un decálogo de asuntos "básicos", entre los que se incluye la revisión del PGOU, proyectos urbanísticos como un gran centro comercial y un complejo residencial de una promotora vinculada a la familia real saudí, el plan de saneamiento de la hacienda municipal, el convenio colectivo del Ayuntamiento o la fijación de la plantilla municipal.

Para Bendodo, la oferta llega a "destiempo" ya que el listado de temas propuesto "no persigue sólo dar respuesta puntual e inmediata a una situación de crisis, sino que representan la parte fundamental de la tarea de gobierno del municipio para los próximos cinco o seis años y eso lo debe llevar a cabo un gobierno consolidado". "Deben ser los ciudadanos quienes decidan sobre estos temas de gran envergadura", insistió.

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El alcalde de Estepona había apelado a la "excepcionalidad de la situación", para invitar al PP a "arrimar el hombro" y comprometerse en aportar "tranquilidad y gobernabilidad" al municipio. "Ha llegado el momento de dejar la chaqueta y los tintes partidistas a un segundo plano y que prevalezcan los intereses comunes", explicó Valadez.

El secretario general de los socialistas malagueños consideró que "es más lo que une que lo que separa" a su partido y al PP y explicó que la disolución de un ayuntamiento es una solución que "debilita a la democracia".

El gobierno municipal que preside Valadez está en una precaria situación puesto que sólo suma nueve de los 25 concejales que forman la corporación municipal. La pasada semana, el alcalde destituyó a la concejal María Miralles, una vez que ésta fue imputada en el caso Astapa, que también ha sido expulsada del PSOE, como ocurre con otros cuatro ediles que mantienen su acta de concejal.

El gobierno municipal lo forman ahora seis ediles socialistas, uno del Izquierda Unida, otra de Estepona 2007 y el edil andalucista Rafael Montesinos que también está imputado en le causa por corrupción.

En el grupo de concejales no adscritos están, además de los cinco ex socialistas, dos del Partido Estepona que decidieron abandonar la formación una vez que los dos ediles imputados que han estado seis meses en prisión, José Ignacio Crespo y Manuel Reina, optaron por no dimitir. El grupo del PES está formado ahora por tres concejales. La corporación la completan los cinco concejales del PP.

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