DOLOR Y RABIA EN AZPEITIA
Fueron cinco minutos de silencio en Azpeitia para repudiar el asesinato de Ignacio Uria a manos de ETA. Pero también fueron cinco minutos de dolor y rabia contenida. Los trabajadores de la constructora Altuna y Uria también se concentraron en contra del atentado, pero sin representantes de la formación abertzale LAB. Uno de ellos se preguntaba en voz alta: "Y a estos de LAB, ¿no los van a echar?".
![](https://imagenes.elpais.com/resizer/v2/RTPOOFUYXQFVWCYRKDGYQ2IAUA.jpg?auth=2730e1647f3a03c7155d881cc12d5b1a77888d4833a6ddeb2714192cc78c1c37&width=414)