Guipúzcoa prepara mejoras fiscales para 150.000 familias

Tal y como ya han hecho Vizcaya y Álava en el último mes, la Diputación guipuzcoana aprobará el próximo martes una batería de medidas fiscales que beneficiarán a unas 150.000 familias en la próxima campaña de la Renta y tratan de amortiguar los efectos de la actual crisis y del estancamiento del mercado inmobiliario. El diputado guipuzcoano de Hacienda, Pello González, anunció ayer que el Consejo de Diputados dará luz verde el próximo martes a un paquete de seis reformas tributarias que inciden en la vivienda, las familias con descendientes y con personas dependientes a su cargo, y a los trabajadores que decidan prejubilarse voluntariamente.

El Ejecutivo foral tiene previsto tramitar con urgencia la propuesta normativa para lograr su aprobación en las Juntas antes de que expire este año y poder aplicarlas en el próximo ejercicio. Entre las medidas, González enumeró la ampliación de seis a ocho años del plazo de vigencia de las cuentas vivienda. En estos dos años de ampliación, el contribuyente podrá practicarse las deducciones correspondientes, con el objetivo de que dispongan de "más tiempo para comprar un piso y puedan acumular un mayor ahorro", explicó el diputado. Del mismo modo, el plazo para reinvertir los ingresos obtenidos por la venta de la vivienda habitual aumenta de dos a tres años. Las personas que se encuentren en una situación económica "extrema" podrán vender su piso antes de cumplir los tres años que se exigen ahora para que sea considerada vivienda habitual y de esa manera no tendrán que devolver las deducciones fiscales recibidas.

Vizcaya perderá 100 millones al derogar el Impuesto de Patrimonio

Las familias con hijos tendrán en su declaración bonificaciones de 547 euros por el primer hijo, 677 por el segundo, 1.145 por el tercero, 1.353 por el cuarto y 1.769 euros por el quinto y siguientes. Estas deducciones se incrementan entre un 5% y un 10% y beneficiará en Guipúzcoa a alrededor de 130.000 familias. Además, por cada hijo menor de seis años hay una deducción complementaria de 313 euros. Esta medida, detalló González, supondrá recaudar cinco millones menos.

Los ingresos obtenidos por cuidadores de personas dependientes no profesionales estarán exentas de tributación en la próxima declaración de la renta. Finalmente, Hacienda sólo computará el 40%, y no el 50% como hasta ahora, de las indemnizaciones percibidas por una prejubilación voluntaria, siempre que esta cantidad no supere los 60.000 euros.

Estas medidas fiscales son gemelas de las que ya están tramitándose en las Juntas Generales de Vizcaya. La Comisión de Hacienda aprobó ayer el proyecto de norma con el apoyo de los socialistas, tras aceptarse cuatro de sus enmiendas parciales. El diputado del ramo, José María Iruarrizaga, defendió en la Cámara provincial el contenido de las normas, cuyo coste fiscal para el erario foral se elevará a 147 millones de euros.

En el caso de Vizcaya son medio centenar de iniciativas, entre las que figuran la derogación del Impuesto de Patrimonio o la deflactación de la tarifa del IRPF en un 2%. Los grupos políticos votaron medio centenar de enmiendas parciales y dos totales (una de EB y otra ANV, que fueron rechazadas), de las que salieron adelante un total de 11 modificaciones: cuatro de PNV, cuatro del PSE, dos del PP y una de EA.

Entre las enmiendas aceptadas más destacadas figura una presentada por el PSE para que se ampliara a cuatro años el plazo de exención para tributar cuando se vende la vivienda habitual, hasta la fecha establecido en dos años. También prosperó otra enmienda socialista que amplía a cinco años el plazo para invertir cantidades obtenidas para el inicio de una actividad o negocio económico.

La reforma más relevante es la desaparición del Impuesto de Patrimonio, que supondrá una merma recaudatoria de 100 millones. Guipúzcoa quiere mantener esta figura fiscal, aunque no ha presupuestado ningún ingreso por esta vía en 2009.