La historia de dos pavos indultados... por la gracia de Bush
El presidente recibe a ' Pumpkin' y a 'Pecan' en el Día de Acción de Gracias
Cada día previo a la celebración de Acción de Gracias en Estados Unidos un pavo, la comida tradicional de esta fiesta, tiene la suerte de recibir un indulto presidencial. En lugar de acabar asado y degustado sobre una mesa, al agraciado se le permite pasar el resto de sus días tranquilo y feliz en una granja. Y tiene un sustituto para el caso de que algo le ocurra. Los afortunados ayer fueron Pecan y Pumpkin. Son los dos últimos pavos que reciben los favores del actual presidente George Bush, que será relevado en la Casa Blanca el próximo 20 de enero por Barack Obama. Pecan y Pumpkin fueron recibidos en el jardín rosado de la residencia presidencial con todos los honores. Son de Iowa, y los nuevos pavos nacionales de Acción de Gracias.
El origen de la tradición no está muy claro, ni quién fue el primer presidente en conceder estos indultos. La Federación Nacional del Pavo regaló por primera vez un pavo por Acción de Gracias al presidente en 1947, cuando Harry Truman ocupaba la Casa Blanca. Pero ¿perdonó Truman a la suculenta ave o se la comió? Las fotos de la época sólo muestran al presidente sonriente ante el pavo regalado y nada indican sobre el futuro del animal. La periodista Monica Hesse aseguraba en las páginas de The Washington Post hace un año que el supuesto perdón de Truman no es más que una leyenda urbana.
Hesse sostiene que Abraham Lincoln perdonó la vida una vez a un pavo navideño; que Kennedy fue el primero en decir en 1963 que el pavo nacional de Acción de Gracias no se matara, pero sin protocolos ni ceremonias de indulto; y que no fue hasta 1989, el primer año de mandato de George Bush padre, cuando se inició la actual y extraña tradición, seguida después por Clinton y Bush hijo. Pecan y Pumpkin fueron ayer largamente acariciados en la Casa Blanca. Después, volaron en primera clase a Los Ángeles para participar como estrellas invitadas en el desfile de Acción de Gracias de Disneylandia, donde estará su nuevo hogar: un rancho en el parque temático más famoso del mundo.
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