El PP pide al Gobierno que invoque la seguridad nacional para evitar la operación

La secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, criticó ayer al Gobierno por provocar que "pueda estar en peligro el control de un sector estratégico" como el de la energía, "gracias a sus veleidades".

La responsable popular cuestionó la viabilidad de la operación por la que la compañía petrolera rusa Lukoil pretende adquirir el 30% de Repsol. De Cospedal ha recordado que la compra la llevaría a cabo una empresa rusa, de un país en el que "son dudosos los procesos de intervención de los mercados". Por eso, el Grupo Popular en la Cámara baja llevará la próxima semana al pleno del Congreso una iniciativa con la que pretende instar al Gobierno a impedir que empresas "públicas o privadas" procedentes de países extracomunitarios tomen participaciones significativas en empresas energéticas que operan en el mercado español.

La portavoz adjunta del PP, Fátima Báñez, calificó como una "vergüenza" la pasividad del Go-bierno ante esta operación. La dirigente popular instó al Ejecutivo a invocar ante la Unión Europea su "potestad" en un caso de "seguridad nacional" ante los riesgos para el suministro, la competencia y el propio mercado interior europeo.

Báñez censuró la "política de aprendiz de brujo" del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, en materia energética que ha pasado de apostar por "campeones nacionales a desmantelar" un sector estratégico para la economía española. "Moncloa ha incentivado el exceso de aplacamiento de Sacyr para adquirir participaciones en empresas energéticas que ahora tiene que vender para cobrar liquidez", concluyó.