Ricardo Pérez-Amat: el compromiso con la Universidad

Ricardo Pérez-Amat, con guión, como él quería, ha fallecido en Madrid un viernes de otoño, la estación que más le gustaba.

Conocí a Ricardo el año 1976 cuando se incorporó al Departamento de Comunicación en la Universidad Complutense de Madrid. Me impresionó que fuera licenciado en Físicas y en Imagen y Sonido, unas titulaciones tan dispares en principio pero que luego, con el tiempo, comprendí que en él se volvían complementarias. Recuerdo tardes enteras intentando hacernos comprender conceptos como entropía, información, neguentropía, redundancia, conceptos para él tan aprensibles como obtusos para nosotros, que veníamos de Letras o de Ciencias Sociales.

Durante esos años en la Complutense, Ricardo, además de seguir con su labor docente e investigadora, se implicó a fondo en la política universitaria. Hombre de profundas convicciones democráticas, quería cambiar el sistema, renovar la Universidad y su pensamiento dogmático. Recuerdo esas interminables asambleas donde discutíamos todo, nos cuestionábamos el modelo, buscábamos respuestas a miles de preguntas sobre cuál era nuestro papel y al final, agotados, nos relajábamos en los bares de la calle de la Princesa, o en la Montaña, con unas cañas y unos calamares a la romana, su plato favorito.

La aprobación de la LRU en el 83 culminó esa etapa y Ricardo Pérez-Amat se doctoró con premio extraordinario, después la titularidad y luego el vicedecanato, y ahí Ricardo demostró, una vez más, su gran talla política y universitaria; le tocó lidiar, entre otros asuntos, con la reforma de los planes de estudio que introdujeron en nuestras vidas esos conceptos hoy tan nuestros como créditos, asignaturas troncales, optativas, primer y segundo ciclo. ¡Cuánto tuviste que pelear y mediar para que no hubiera fricciones entre los departamentos, entre los profesores!

En 1999 le ofrecieron a Ricardo Pérez-Amat trasladarse a la Universidad Rey Juan Carlos para poner en marcha la Facultad de Ciencias de la Comunicación. No se lo pensó dos veces, pues le gustaban los retos y éste sin duda lo era. ¡Cuánto le agradecí que me propusiera acompañarle en esa nueva andadura! Recuerdo las horas y horas de trabajo interminable cuando todavía no había nada en Fuenlabrada, sólo barro y unos cimientos de un edificio que parecía que nunca se fuese a acabar.

La espléndida Facultad de Comunicación de la URJC le debe mucho al profesor Ricardo Pérez-Amat, en ella se dejó la piel y todos tus compañeros somos conscientes de ello y te lo agradecemos de corazón. La facultad sin ti se queda huérfana.

En los últimos años, Ricardo se comprometió también con la política local; participaba, como tertuliano, en El Foro de la cadena SER y se notaba a la legua su militancia socialista, su fina ironía y su erudición. La radio era lo que más le gustaba, y en lo privado amaba el cine, la ópera, la música sinfónica, la danza; en esta última hizo sus pinitos, siendo muy joven, y no con mucho éxito, pero ahí quedan esas fotos que tanto nos hicieron reír.

Ahora, Ricardo, desde donde esté, podrá conversar con quien fue su autor más admirado, Oscar Wilde, y mientras tanto nosotros aquí te añoraremos. Hasta siempre, Ricardo.

(Ricardo Pérez-Amat, catedrático de Periodismo de la Universidad Rey Juan Carlos, nació en Almería en 1952 y falleció en Alcorcón -Madrid- el viernes 14 de noviembre de 2008).

Carmen Caffarel Serra, catedrática de Comunicación Audiovisual de la Universidad Rey Juan Carlos. Directora del Instituto Cervantes.