Manel presenta credenciales

Se conocieron en el colegio, en el barcelonés Costa i Llobera. Dos de ellos tenían cierta formación musical, pero el grupo fue impulsado por los que carecían de ella. Son, respectivamente, Martí Maymó, Arnau Vallvé, Guillem Gisbert y Roger Padilla. Cuentan entre 23 y 27 años y han estudiado periodismo, cine y sonido. Viven todos fuera de la casa familiar. Juntos se hacen llamar Manel. Mañana comienza a llegar a las tiendas su primer larga duración, Els millors professors europeus, un disco del que afirman, restándole importancia: "Sólo es una colección de canciones sin nexo común más allá de nuestro propio estilo". Algo más debe de haber cuando el boca-oreja ya ha convertido a Manel en el grupo más conocido entre los desconocidos, moviendo bastante público en unas actuaciones que cada vez menudean más.

"No nos consideramos 'folk', sino más bien un grupo de pop"

"No nos consideramos folk, sino más bien un grupo de pop", afirman en el bar de barrio que han seleccionado para la entrevista. Lo de folk puede venir por el entorno acústico de su propuesta -guitarras, ukeleles, banjos, flautas, violines-, así como por la estructura de sus historias: "Es cierto que las historias que contamos sí pueden tener una estructura folk, popular. De hecho, nos encantaría que alguna de nuestras canciones formase algún día parte de los cancioneros populares que se utilizan en las escuelas". Hay donde escoger: desde narraciones sobre una seducción planificada (Plan quinquenal) a irónicas visiones sobre el turismo (Roma), pasando por atinados comentarios sobre la cirugía estética (Els guapos són els raros), reflexiones sobre la vida en pareja (Corrandes de la parella estable), desalentadoras observaciones sobre la vida cotidiana (Captatio benevolentiae) y miradas sobre celebraciones populares (Ai, Dolors!). Y entre todas evocan a Sisa, Pau Riba, Antònia Font, Albert Pla, Quimi Portet y Manu Chao, entre otros.

¿En qué se diferencian de ellos? "Los galácticos, Sisa o Antònia Font, construyen sus letras con más inclinación a la metáfora, a la imagen verbal. Nosotros somos muy literales, no hay saltos hacia la metáfora, no hay alegorías". ¿Música popular? "No, más bien pop. O si hablamos de folk habría de ser urbano porque nuestra música, igual que nosotros, es urbana. Creo que lo de folk nos viene por canciones como Nit freda per ser abril. A causa de ella nos han preguntado por el Grup de Folk, pero es hilar muy fino". Quizá también ayude su aire optimista y festivo, capaz de hacer bailar mientras cantan letras bastante elaboradas. "Es posible, pero por ejemplo nos han dicho que Captatio benevolentiae es una canción alegre, cosa que a nosotros jamás se nos habría ocurrido".

Escuchan desde Herman Dune a Magnetic Fields, Sisa, conocido en el colegio, y Serrat, mamado en casa, como Dylan. Preparan para Sputnik una versión de Common people, de Pulp, y de No t'enyoro, de Els Pets. Su canción más popular, En la que el Bernat se't troba, parece idónea para un foc de camp, pero en su disco hay sirtaki, violines klezmer y melodías italianizantes. No les sirvieron para ganar el concurso Sona 9, del que quedaron finalistas en 2007 y con cuyos 6.000 euros de premio se han pagado este álbum de debut. Sin duda el debut más esperanzador desde que Antònia Font reiteró que el pop en catalán puede ir más allá de los lugares comunes. En ese espacio vive Manel. Ahora esperan las visitas.