Un eurodiputado acusa a la UEFA de usos "medievales"
El eurodiputado socialista Antonio Masip intervino ayer en el pleno del Parlamento Europeo, en Estrasburgo, para condenar "los procedimientos arcaicos y medievales empleados por la UEFA contra el Atlético de Madrid, los aficionados y la policía".
Masip pidió la palabra al inicio de la sesión para censurar la decisión de la UEFA de sancionar al Atlético con el cierre del estadio Calderón durante dos partidos por los incidentes ocurridos el 1 de octubre durante el encuentro con el Marsella. Los sucesos fueron generados por seguidores franceses y requirieron la intervención policial. La sanción imponía además al club madrileño jugar a más de 300 kilómetros de la capital española. Posteriormente, la UEFA suspendió provisionalmente su acuerdo. La vista de la apelación está prevista para el día 31.
El eurodiputado considera que "la UEFA ha dictado una sanción totalmente injusta desde el punto de vista del derecho ordinario porque ha dejado en la indefensión al Atlético". Para Masip, lo más grave es que, "en el caso de recurso ante los tribunales ordinarios, se corre el riesgo de que la UEFA endurezca la sanción". A su juicio, esto es insostenible en una Europa basada en el Estado de Derecho y en instituciones democráticas: "Hay que acabar con este tipo de actuaciones medievales, arbitrarias y de horca y cuchillo".
"Al margen del derecho"
Masip, miembro de la Comisión de Asuntos Jurídicos del Parlamento, mostró especial indignación por las críticas a la actuación policial por parte de la UEFA. Así, recordó que España es un Estado de Derecho, miembro de la Unión Europea, y que la actuación de la policía fue "ejemplar".
En su intervención, el eurodiputado dijo que no se trataba de una cuestión particular, sino de una actitud general: "No vamos a parar hasta acabar con estas prácticas al margen de los procedimientos del derecho". "Hay que terminar de una vez por todas con que estos señores del fútbol actúen al margen del derecho", agregó. La protesta es un primer paso y una clara advertencia para que la UEFA reflexione y "no se suba más a la barba del derecho", concluyó.
Mientras tanto, el PSV Eindhoven, uno de los rivales del Atlético, ha solicitado a la UEFA que permita que el choque que medirá a ambos equipos en España el 26 de noviembre se dispute en Madrid. Alega que 500 seguidores suyos ya han comprado los billetes de avión y reservado hoteles.
