Guipúzcoa analiza mejoras en la línea de autobús a Bayona

Las Juntas Generales de Guipúzcoa acordaron ayer por unanimidad solicitar a la Diputación que trabaje conjuntamente con el Ministerio de Fomento para estudiar la posibilidad de integrar el billete único en la línea de autobuses San Sebastián-Bayona (Francia), así como la ampliación del horario y las frecuencias de este servicio.

La propuesta fue inicialmente presentada por Aralar, pero fue consensuada después con los partidos del gobierno foral (PNV-EA) y los socialistas. La iniciativa pretende extender el billete único -un sistema que permite beneficiarse de descuentos del 40% en la tarifa desde el primer viaje- a los autobuses que comunican Bayona con la capital donostiarra. A este sistema se incorporará en diciembre los autobuses urbanos de la Compañía del Tranvía de San Sebastián.

El juntero de Aralar Patxi Aierbe defendió la necesidad de ofrecer ventajas económicas a los viajeros que utilizan la única línea de autobuses que comunica Guipúzcoa con el País Vasco francés, lo que supondría "un salto cualitativo en la mejora del transporte público" que se está dando en el actual mandato.

Aierbe aprovechó para criticar el deficiente servicio que se ofrece en la actualidad en la citada ruta, por la escasez de frecuencias. Informó de que las salidas de San Sebastián son a las 9.30 y a las 14.30, y desde Bayona, a las 12.00 y a las 18.30. "Los horarios demuestran que es un servicio pensado para otra época", adujo.

La "insuficiente" oferta acarrea, en opinión de Aralar, un aumento del uso del transporte privado y "no ayuda a estrechar los vínculos sociales y económicos que existen entre los dos territorios".

Autocares a Loiu

Por otro lado, las Juntas también instaron al Departamento de Movilidad a que continúe con el servicio de autobús directo entre San Sebastián y el aeropuerto de Loiu hasta finales de año. Esta decisión ya fue anunciada a finales de septiembre por la titular del departamento, Arantxa Tapia, quien aseguró que los autobuses funcionarán hasta el 31 de diciembre próximo.

La decisión de mantener la línea fue tomada tras una petición hecha por la empresa concesionaria, Pesa, y a la vista de los "buenos resultados" que se habían logrado durante los meses de verano en que estuvo funcionando a modo de prueba.

La medida fue aprobada por todos los grupos políticos de la Cámara, que además solicitaron a la Diputación que no descarte darle continuidad a partir del año que viene. Entre junio y septiembre 36.300 viajeros hicieron uso de estos autobuses.