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El alcalde de Coslada pidió silencio más de 70 veces y amenazó con parar el pleno

Rebeca Carranco

El pleno ordinario, con seis puntos del día, más un turno de ruegos y preguntas, empezó con la sala a reventar. Además de las 76 butacas, decenas de personas esperaban sentadas en el suelo y medio centenar de pie. Los vecinos afectados por las riadas querían respuestas, después de que por la mañana en el pleno extraordinario sobre los aguaceros no hubieran tenido turno para preguntas. También soluciones, puesto que las resoluciones de dicho pleno (la más importante, exigir al Gobierno regional y al Ayuntamiento de Madrid un colector en el margen de la M-45) no les satisficieron. Temen que el viernes llegue más lluvia y con ella, más riadas.

Pero tampoco hallaron remedios a sus males en el pleno ordinario. Promesas de "lo estudiaremos" o algún "déjame tu teléfono y veremos tu caso" es todo lo que se llevaron cuando llegó su turno después de dos horas y cuarto escuchando a la corporación municipal hablar de expedientes, planes de ahorros y hasta de Cuba, Irán, el fascismo o Aznar. Y eso les desesperó. Y la desesperación les llevó a abuchear, gritar e incluso insultar a los ediles. El alcalde, Ángel Viveros (PSOE), pidió silencio en más de 70 ocasiones y amenazó cuatro veces con parar el pleno.

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En lugar de responder a los vecinos, socialistas y populares se dedicaron a la bronca personal. Sólo un ejemplo: "¿Ahora que están en la oposición se preocupan de los colectores?", le dijo el alcalde, Ángel Viveros, al portavoz popular, Raúl López, y ex primer edil. Lo que le granjeó una ovación de los ciudadanos. López le acusó de hacer mitin.

A las ocho y cuarto llegó finalmente el turno de los vecinos. Hasta 18 personas intervinieron. Como Aquilino Amaro, que aseguró que sus daños superaban los 18.000 euros. Uno de los últimos fue Jesús Burgallo, que preguntó a los ediles qué va a ser de su familia el viernes, cuando les echen del hostal. La corporación le ofrece un aval en un piso de alquiler, el primer mes de renta y la mitad durante otros seis meses. Burgallo se marchó a gritos de "¡Corruptos!".

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Sobre la firma

Rebeca Carranco
Reportera especializada en temas de seguridad y sucesos. Ha trabajado en las redacciones de Madrid, Málaga y Girona, y actualmente desempeña su trabajo en Barcelona. Como colaboradora, ha contado con secciones en la SER, TV3 y en Catalunya Ràdio. Ha sido premiada por la Asociación de Dones Periodistes por su tratamiento de la violencia machista.

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