Aumentan los desplazamientos en transporte público a costa del coche

La crisis llega al coche. No sólo a la fabricación y venta, también a su uso en los desplazamientos cotidianos. De los 14,2 millones de desplazamientos que se efectúan de media diariamente en la región metropolitana de Barcelona, 5,1 millones se hacen en coche. El año pasado eran 5,6 millones, lo que representa un descenso del 8,7%. Que la caída está asociada al retroceso en la actividad económica lo muestran dos datos: el principal retroceso en el uso del coche se produce en la denominada "movilidad ocupacional", directamente vinculada a los desplazamientos asociados a la vida laboral, y el descenso afecta al número total de desplazamientos, que el año pasado fueron 14,6 millones y este año el 3% menos.

Los usuarios dan la peor nota a la frecuencia de paso de los buses urbanos

Los datos proceden de la Encuesta de Movilidad en Día Laborable, que anualmente realizan los poderes públicos vinculados al transporte, y ayer se hicieron públicos en lo que se refiere a 2008.

Manel Nadal, secretario de Movilidad, leyó los resultados en clave optimista: el retroceso en la movilidad se centra sobre todo en el coche, de modo que la gente opta por desplazarse por otros métodos: a pie, en bicicleta y en transporte público. Sobre todo en transporte público, cuyo uso sube por primera vez hasta situarse en el 20,6%. Es decir, de cada 10 desplazamientos, dos se hacen en transporte público, aunque esta cifra se transforma en 1,5 si se toma como referencia toda Cataluña, ya que el uso del transporte público en la región metropolitana es bastante más alto.

La satisfacción de Nadal se basa en que los movimientos a pie (43%) y los efectuados en transporte público (20,6%) sumados superan ampliamente los del coche privado (36,4%), unido a que por primera vez en años los dos primeros suben y el vehículo privado baja. Nadal explicó que no se ha evaluado el impacto de la crisis en el cambio del coche a metro, tren y autobuses, pero sugirió que algo tendrá también que ver la mejora de la oferta en el transporte público, además del impulso dado en la ciudad de Barcelona al uso de la bicicleta.

La encuesta de movilidad describe también las causas de los desplazamientos, según se deban a trabajo (17,9%), estudios (4,2%), compras (8,7%), ocio (5,1%) o, simplemente, a la decisisión de dar un paseo (2,9%), datos referidos siempre a la región metropolitana y que experimentan ligeras variaciones si se extrapolan a toda Cataluña.

Cada catalán de más de 16 años hace, de media, 3,5 movimientos al día. Pero mientras que la media de los estudiantes se eleva al 3,7, la de los pensionistas cae al 2,8; en cambio, tanto parados como empleados se mueven de forma similar: 3,5 veces de media.

Por grupos de edad, el mayor número de desplazamientos lo efectúan las personas que tienen entre 30 y 64 años (3,6 de media), los mayores de 65 años sólo realizan 2,6 desplazamientos, y quienes se hallan entre los 16 y los 29 años, 3,5. Tampoco se mueven igual los hombres (3,4 desplazamientos de media al día) que las mujeres (3,3).

La encuesta incluye una consulta sobre la calidad de los diversos modos de transporte. El tranvía es el mejor valorado, con una nota de 7,5 sobre 10, seguido de Ferrocarrils de la Generalitat, con un 7,3. La peor puntuación la obtiene Renfe: 5,9 tanto para Cercanías como para el servicio de trenes regionales. No obstante, la nota más baja en lo que a frecuencia de paso se refiere no es para Cercanías, sino para el servicio de autobuses de la ciudad de Barcelona, que se queda en un 5,5. En general, la ciudadanía aprueba el transporte público, sobre todo porque ofrece seguridad personal y tiene un impacto ambiental inferior al del coche.