"Ahora es menos imposible"

La boda se celebrará en siete días, pero ahora el mando en los preparativos ha cambiado de manos. "Ella es el jefe", admite Mardy Fish mientras abre la malla que separa la acera de su pista de entrenamiento. Hace una semana, el equipo de Estados Unidos llegó a Madrid obsesionado con ocultar una baja. "Bob Bryan vendrá", aseguraron jugadores, técnicos y empleados federativos. El chico, sin embargo, no llegó nunca. No es una ausencia cualquiera. El tenista, lesionado en el hombro derecho, forma con su hermano Mike la mejor pareja de dobles del mundo. Los mágicos Bryan, les llaman. Hoy, a las tres de la tarde, Bob será sustituido por Fish, que preparaba su boda cuando le llamaron. "A Madrid", le dijeron. Y a Madrid llegó, convertido en una oportunidad única para España, que puede cerrar hoy su pase a la final de la Copa Davis y descubrir si ha encontrado la pareja de dobles que lleva tantos años buscando.

"Sigue siendo muy difícil, pero ahora tenemos más que ganar que antes... Y también más presión", dice Fernando Verdasco, que jugará con Feliciano López. "Contra los Bryan, siendo ellos quienes son, no teníamos nada que perder. Al fallar uno de ellos tenemos más obligación de tener posibilidades de ganar el punto. Aún así, Fish saca bien, resta bien y volea bien... Tiene un juego peligroso para el dobles", añade. "Ahora pasa a ser menos imposible, aunque será duro".

¿Qué cambia la baja del zurdo de los Bryan? "Mardy es diestro y yo estoy acostumbrado a jugar con Bob", contesta bajo su gorra de béisbol Mike Bryan. "No usamos muchas señales. Con Mardy, sin embargo, lo haré", prosigue. "Toda la semana, hemos trabajado cosas que Bob y yo utilizamos normalmente sobre tierra y que son eficaces. En realidad, hay algunas cosas que quizás él haga mejor que Bob. Restar, por ejemplo. Será una buena experiencia apartarme de Bob y encontrar mi propia identidad. Hasta ahora, las cosas nos van bien. Bob debería estar asustado".

En una especialidad hecha de complicidades y sobrentendidos, la baja de Bob Bryan puede ser determinante. A un lado está lo técnico. Al otro, lo emocional. "Lo importante es lo compenetrados que están por ser hermanos. Llevan toda la vida juntos, y eso es importante en sus éxitos", analiza López. "Fish y Mike no han jugado nunca juntos... En momentos importantes, difíciles e igualados, quizás no se sentirán tan cómodos".