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19 muertos en un motín en Tijuana

La policía mexicana disparó a matar para acabar con la rebelión en la cárcel

La lista de los 45 reclusos heridos durante el motín del penal de Tijuana no deja lugar a dudas de lo que sucedió allí dentro. "César Santiago Ramírez: lesionado por proyectil de arma de fuego en tórax. Rubén Gaxiola Valdez: lesionado por arma de fuego en fémur y genital. Reo de nombre desconocido: lesionado por proyectil de arma de fuego en el cráneo...". La cuestión parece clara: los presos se amotinaron y la policía entró y disparó a matar. El resultado: 19 reclusos muertos -aunque fuentes no oficiales hablan de muchos más- y otros 45 heridos, además de unos 200 trasladados a otras cárceles y altercados entre familiares y fuerzas antidisturbios en las inmediaciones de la penitenciaría.

La mecha se prendió el domingo. Al parecer, un recluso murió tras una paliza de los celadores. Se produjo un conato de motín que los funcionarios atajaron con el resultado de tres presos muertos. Pero ésa no es una cifra que llame la atención en un país donde un día aparecen 12 cadáveres sin cabeza, a la semana siguiente 24 ejecutados con tiro de gracia y 48 horas después se registra en Morelia el primer atentado narcoterrorista contra la población civil. Así que ayer, y sobre los rescoldos del motín mal apagado, surgió otro de grandes proporciones.

La cifra de 19 muertos es aún provisional, pero lo que sí está claro es que las autoridades ya han admitido de facto su responsabilidad. Tres funcionarios penitenciarios fueron ayer detenidos e imputados por "las omisiones y excesos que ellos o sus subalternos pudieran haber cometido durante el sangriento motín del penal de La Mesa".

Dada su ubicación, en la frontera más transitada con EE UU, el penal de Tijuana reúne a lo más granado del crimen organizado. Y, por si fuera poco, la fragmentación que están sufriendo los carteles tradicionales de la droga también se traslada intramuros. A ello se le une el hacinamiento, la corrupción de los carceleros y la brutalidad policial.

Presos amotinados en la cárcel de Tijuana, en el norte de México.
Presos amotinados en la cárcel de Tijuana, en el norte de México.EFE

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