El Pacto de Crecimiento y Empleo carece de concreción presuestaria

Nueve meses de negociaciones concluyeron ayer con un acuerdo definitivo para reeditar el Pacto por el Crecimiento y el Empleo (Pavace), la principal herramienta política del diálogo social. Consell, empresarios y sindicatos coincidieron ayer en expresar su satisfacción, aunque Comisiones Obreras, cuyo consejo confederal respaldó preacuerdo con un 98% de los votos, expresó una cautela: el nuevo Pavace, que tendrá una vigencia de cinco años, carece de concreción presupuestaria. Por lo que sus mecanismos de supervisión y control, que han sido reforzados en esta ocasión, deberá empezar a funcionar tan rápido como la Generalitat presente sus presupuestos para el año que viene, señaló Joan Sifre, secretario general del sindicato.

El vicepresidente del Consell y consejero de Economía, Gerardo Camps, señaló por su parte que, según una estimación "global", las líneas generales del Pavace tendrán una dotación económica cercana a los 4.500 millones de euros para los dos próximos ejercicios. A pesar, dijo, de que los presupuestos de ambos años serán "restrictivos", como corresponde a una época de crisis económica.

El pacto por el crecimiento y el empleo trata, en realidad, de todo lo que puede identificarse con políticas sociales, incluidas algunas que han sido asimiladas hace relativamente poco. Comprende, por ejemplo, la extensión de la educación de 0 a 3 años a través de una red de centros escolares públicos; el desarrollo de la ley de dependencia y de la renta mínima garantizada; fija objetivos medioambientales y de vivienda protegida, y refuerza los instrumentos de intervención de los sindicatos.

Rafael Recuenco, secretario general de UGT-PV, señaló que el camino para alcanzar el acuerdo ha sido el más largo que se ha tenido que recorrer "en esta comunidad autónoma". Y que para lograrlo, todos "han tenido que dejar algo en la gatera". Se trata de un "documento estratégico, cuyo objetivo es trasladar a la sociedad un mensaje de confianza" en un periodo de gran incertidumbre económica. El presidente de Cierval, la patronal valenciana, Rafael Ferrando, subrayó la importancia de que los agentes sociales sigan apostando por el modelo del diálogo para definir las políticas, y destacó que el nuevo Pavace incluye un sistema de seguimiento de sus objetivos "más operativo y más dinámico".

El consejero de Economía declaró que el pacto, que será firmado el lunes, seguía las líneas maestras de la política social y económica que desarrollado la Generalitat valenciana en los últimos años: estimular el crecimiento para que así se genere el empleo que debe hacer posible mantener el mantenimiento de la cobertura social.

Camps se mostró muy crítico con las, en su opinión, escasísimas recetas económicas expuestas por el presidente del Gobierno en el Parlamento, y afirmó que "ya estamos en recesión".