_
_
_
_
Editorial:
Editorial
Es responsabilidad del director, y expresa la opinión del diario sobre asuntos de actualidad nacional o internacional

El ojo de Edvige

Delirio orwelliano o simple actualización en soporte digital de los archivos policiales, el caso es que en Francia se ha desatado una tormenta política y social por Edvige, el plan para extender los ficheros de la policía a todas las personas mayores de 13 años "susceptibles de atentar contra el orden público", así como a personalidades políticas y sindicales. Pasó sin pena ni gloria como un decreto gubernamental en junio, pero cuando trascendió levantó tal barahúnda que centenares de asociaciones, incluidas las de magistrados y la patronal, se levantaron en armas. Al menos 13 recursos han sido elevados al Consejo del Estado, que es quien tiene la última palabra.

Edvige, acrónimo que responde a Explotación Documental y Valorización de la Información, le ha producido un sarpullido posvacacional a Sarkozy, ahora que el presidente empezaba a remontar su baja popularidad en las encuestas por sus mediaciones diplomáticas internacionales, hasta el extremo de que ha dado instrucciones a la ministra del Interior, Alliot-Marie, para revisar el decreto. Sarkozy sabe de lo que habla porque fue titular de ese departamento antes de llegar al Elíseo. Uno de los miembros del Gobierno, el centrista Morin, responsable de Defensa, ha criticado también la medida.

Alliot-Marie ha insinuado la posibilidad de que el nuevo fichero, que pretende ser una actualización del confeccionado en 1991, durante la presidencia de Mitterrand, por los servicios de información franceses, no incluya, como está previsto, datos relativos a la orientación sexual y a la salud de las personas. E igualmente, reconocer una especie de derecho al olvido para los menores pasado un tiempo. Sea o no revisado el decreto en cuestión, el caso de Francia ilustra el progresivo control y vigilancia del ciudadano que se respira en las sociedades democráticas, con el argumento de la seguridad pero también con grave menosprecio de las libertades.

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_