A patadas con una caja de caudales

Lo que en principio parecía un robo de cable de cobre en una calle de Coslada (86.500 habitantes) se convirtió en la recuperación de una caja fuerte robada en la zona de Fuencarral, en la capital, en cuyo interior había joyas y efectos valorados en 120.000 euros.

La escena se produjo el pasado sábado, cuando un vecino de Coslada vio a un grupo de personas que estaba golpeando en la calle de Manuel Azaña una arqueta. De inmediato llamó desde su teléfono móvil a la policía, y les advirtió de que estaban intentando robar cables de cobre procedentes de una arqueta.

Al lugar se desplazaron varios coches patrulla de la Policía Local. Cuando llegaron los agentes, ya no había nadie en la zona. Sin embargo, se percataron de que una mujer había salido corriendo. La detuvieron, según fuentes municipales. El hombre que llamó a la policía la identificó como una de las que estaba en el grupo.

Indocumentada

Cuando volvieron al lugar, la arqueta era una caja fuerte que intentaban reventar en medio de la calle. La mujer, indocumentada, no dio ninguna explicación sobre su procedencia ni la forma en que había llegado a sus manos.

Cuando la caja de caudales fue abierta, los agentes encontraron joyas y valores cuya cuantía ascendía a unos 120.000 euros. También pudieron determinar que había sido sustraída hacía unos días en una vivienda del distrito de Fuencarral, en la capital, según explicó el propietario cuando le fueron devueltas sus pertenencias. La policía intenta localizar al resto de integrantes de la banda.