Galicia registra la mitad de incendios que el año pasado

Los datos del Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino han registrado, entre enero y el 10 de agosto, la mitad de incendios que el año pasado. El número de conatos de fuego no ha llegado, durante estos ocho meses, a los 1.000, lo que significa una cifra diez veces inferior a la media de la última década y el 19% de todos los contabilizados en España, según indicaron desde la Plataforma de Axentes Forestais e Medioambientais de Galicia.

"El clima sólo no explica la situación; hubo años mejores y con más incendios"

El portavoz de la agrupación de agentes forestales, que reúne a los afiliados a los sindicatos UGT, CC OO y CSI-CSIF, atribuyó a "la humedad, la ausencia de viento nordés y de altas temperaturas" la escasez de fuego en los montes gallegos. Para Alejandro Rodríguez, "habría que ver si con otras condiciones la actividad incendiaria se plasma en una proporción de superficie afectada como la de años anteriores", informa Europa Press. Según el representante de UGT en la plataforma, Antonio Pimentel, "las condiciones meteorológicas reducen la intencionalidad y el movimiento de los pirómanos". "Con este tiempo disminuye la tentación de plantar fuego, que, de todas formas, no prende", añadió.

Pero la Consellería de Medio Rural ofrece una argumentación diferente a la de los agentes forestales. "Hay un combinado de causas que ayudan a explicar los números", indica el director general de montes, Alberte Blanco, quien no niega lo "positivo" de la "coyuntura climática, con una primavera muy húmeda que se alargó hasta el principio del verano". Aunque matiza: "El tiempo por sí solo no es suficiente; hubo otros años con clima más positivo y sin embargo más incendios".

Para el responsable de Montes, se ha comprobado "el efecto de la vigilancia disuasoria, la buena vigilancia preventiva, además de la divulgación social" de la problemática de los incendios. Blanco señala, igualmente, "la mayor eficacia también a la hora de apagar los fuegos: hay menos y los que hay se apagan antes". "La implicación de los propios vecinos en la vigilancia, a través de las 72 agrupaciones que están en marcha [más de 1.100 personas] es clave para prevenir los incendios", asegura, antes de afirmar que "la situación es esperanzadora. Es temprano para decir si se consolida y se convierte en tendencia histórica, pero considero que nos encontramos en el inicio de un cambio".

A pesar de la reducción de focos incendiarios, sin embargo, la mayor parte continúan siendo intencionados. Alrededor de un 70% en lo que va de año. "Pero intencionados significa que alguien está limpiando una finca, o que se utiliza el fuego en la regeneración de pastos [práctica común en el sur de Galicia]", relata Alberte Blanco, "los incendios intencionados y dolosos resultan mucho más difíciles de cuantificar".

El sindicalista de UGT, Antonio Pimentel, criticó los resultados del monte gallego en lo que respeta a hectáreas arboladas afectadas por el fuego. "Los datos estatales son inmejorables, pero muestran un muy mal resultado en Galicia. ¿Cómo puede ser que en un año así no mejoremos los resultados", apuntó. El delegado del CSIF en la Plataforma de Axentes Forestais e Medioambientais se refirió a la "necesidad de no bajar la guardia, ya que si cambian las condiciones meteorológicas, en una semana se puede vivir una catástrofe similar a la de 2006".

"Septiembre aún es un mes de alto riesgo en Galicia en lo referente a fuegos", reconoce el director general de Montes, Alberte Blanco. Los últimos datos disponibles en el seguimiento diario de la Consellería de Medio Rural, correspondientes al pasado domingo, apenas registraron siete incendios en Galicia, en los que ardieron 0,66 hectáreas.