Los regantes ahorran un 30% de agua con goteros enterrados

El déficit hídrico, casi endémico, de las cuencas andaluzas hace que el futuro de la agricultura pase por el uso sostenible del agua y por un riego más eficiente. Un novedoso sistema de regadío con los goteros enterrados en medio de las camadas de olivar, implantado por muchos olivareros de la comarca jiennense de La Loma, reduce hasta en un 30% el consumo de agua. También evita el problema de las averías por roedores o en la maquinaria.

"Gota de agua que metes en la red, gota de agua que llega al olivar. Todo son ventajas y menos mano de obra en el mantenimiento, porque como está enterrado sólo tienes que cuidar la entrada del agua, que esté en óptimas condiciones", apunta Marcelo Morales, presidente de la Asociación de Regantes de Andalucía (Areda) que, junto a la Unión de Pequeños Agricultores (UPA), está impulsando la instalación de este sistema de regadío cuyo coste sería de unos seis o siete euros por olivo. Se trata de un sistema que puede extenderse también a los cítricos y todos los cultivos leñosos y que según los expertos mejora el desarrollo vegetativo del árbol.

El secretario general de UPA en Andalucía, Agustín Rodríguez, cifra en más de 200 millones de euros la inversión realizada por los olivareros de la cabecera de la cuenca del Guadalquivir en la última década para modernizar sus sistemas de regadío. "Se ha hecho un esfuerzo sobrehumano para modernizar el riego, pero es una satisfacción bastante grande que la forma de regar en esta zona se haya convertido, hoy por hoy, en un referente a nivel nacional", destaca Rodríguez.

Ayudas

La Asociación de Comunidades de Regantes de Andalucía (Feragua) ha solicitado a la Consejería de Agricultura y Pesca ayudas para la instalación de sistemas de riego eficientes a nivel de parcelas, también llamado "amueblamiento". Se trata de ayudar a las explotaciones agrarias a instalar a nivel de parcela riego localizado y riego por aspersión con cobertura total, que cuenta con contadores individuales y facilita la diversificación de cultivos de mayor generación de riqueza y empleo.

Para la instalación de sistemas de riego eficientes en parcela sería necesario una inversión de 400 millones. Actualmente, cerca de 700.000 hectáreas, el 70% de la superficie de regadío en Andalucía, tienen ya infraestructuras comunes modernizadas.