El primer crimen conyugal en 14 meses conmociona la Rioja Alavesa
La Ertzaintza detiene a un vecino de Baños de Ebro por degollar a su esposa
La Ertzaintza detuvo en la mañana de ayer a Cristóbal Martínez, un agricultor de 72 años vecino de Baños de Ebro, una pequeña localidad de apenas 400 habitantes de la Rioja Alavesa, como supuesto autor de la muerte de su esposa, Estíbaliz Angulo, de igual edad, a la que degolló. Los agentes de la policía vasca, a los que el mismo hombre avisó de lo que había ocurrido, se encontraron en el domicilio del matrimonio con el cadáver de la mujer, que presentaba diversas heridas de arma blanca en el cuello, y con el supuesto agresor, que se había autolesionado con el mismo cuchillo en diversas partes del cuerpo. Martínez fue trasladado de inmediato al Hospital de San Pedro, en Logroño, para ser tratado de sus lesiones. Allí permanecía anoche ingresado con pronóstico reservado tras ser operado, bajo custodia policial. Angulo es la primera mujer que muere en Eusladi en un caso de violencia conyugal desde junio de 2007. En lo que va de año, 44 mujeres han muerto en España por esta causa, contando el crimen de ayer.
La fallecida jamás había presentado una denuncia por malos tratos
Los ertzainas, destinados en la comisaría de Laguardia, llegaron antes de las diez de la mañana al domicilio familiar, sito en la calle Mayor del municipio. Allí se encontraron con un drama que ha conmocionado profundamente a toda la comarca, donde el matrimonio es muy conocido y tiene numerosos parientes. La fallecida era tía carnal del alcalde de Baños de Ebro, Luis Antonio Troncoso, del PNV, quien ayer, visiblemente afectado, no atendía llamadas telefónicas. A última hora de la tarde, acompañado por un grupo de vecinos, estudiaba la respuesta institucional para un suceso que le ha afectado tan de cerca.
Nadie en toda la Rioja Alavesa se explica lo sucedido, que investiga la Ertzaintza. La fallecida nunca había presentado una denuncia contra su marido ni comentado en ningún momento que pudiese ser maltratada. Era un "matrimonio modelo", según todos los vecinos consultados. Fuentes cercanas al caso indicaron a EL PAÍS que a Martínez se le había diagnosticado recientemente una profunda depresión.
Todos sus vecinos le consideraban un hombre bueno, "el que ponía paz en momentos de discusión", recordaba ayer uno de ellos, aún atónito. Otra estaba tan afectada que no quería siquiera salir de su casa.
Ya jubilado Martínez como viticultor, la hacienda familiar la lleva en la actualidad su hijo varón, Juan Ramón, quien se encuentra de vacaciones en Estados Unidos, de donde regresará hoy. Las otras dos hijas, residentes en Vitoria, también se hallaban fuera del pueblo cuando se produjo el suceso.
Las reacciones ante este nuevo caso de violencia conyugal se sucedieron a lo largo de la jornada. En su homilía por la festividad de la Virgen, el obispo de San Sebastián, Juan María Uriarte, recordó a Angulo, que se suma a la lista negra de las "alrededor de 70 mujeres que mueren cada año en España víctimas de parejas celosas, agresivas, machistas y perturbadas", informa Yolanda Montero.
La Diputación de Álava mostró su solidaridad con la familia de la fallecida y solicitó que se mantenga "tolerancia cero contra todo tipo de violencia y en especial la que sufre la mujer. La presidenta de las Juntas Generales de Guipúzcoa, la socialista Rafaela Romero, pidió que los crímenes sexistas no queden impunes.
La asociación Clara Campoamor anunció que se personará como acusación particular en esta causa.
"Un matrimonio modelo"
De misa cada domingo y aperitivo en el bar del pueblo, el matrimonio formado por Cristóbal Martínez y Estíbaliz Angulo estaba considerado como una pareja "modelo" por el resto de los vecinos de Baños de Ebro. Ninguno podía recordar ayer un encontronazo entre ambos, ni malas palabras, ni un gesto hosco por parte de él en toda su vida. "Yo solía consultarle para cuestiones relacionadas con el cultivo de la viña por la sensatez de sus opiniones", apuntaba ayer a este periódico un vitivinicultor del pueblo.
"Todavía tengo la carne de gallina. Si Cristóbal ha hecho esto, me da miedo pensar de adónde puede llegar la naturaleza humana", afirmaba otro vecino de un pueblo que se dedica en su mayoría al cultivo de la vid en la hectárea de oro de la viticultura española. Los agricultores de Baños, como los del resto de la Rioja Alavesa, pueden presumir de los terrenos cultivables mejor valorados de España. Martínez disfrutaba, por tanto, de la mejor situación posible para un agricultor.
Había conseguido que el varón de sus tres hijos mantuviese la hacienda familiar. Las otras dos hijas residían en Vitoria. Desde hace unos años, ni se preocupaban por la venta el vino de cosechero que solían elaborar con parte de las uvas, ya que vendían toda la vendimia a una bodega reconocida.
Ante lo inexplicable del drama, el dolor se hizo ayer señor de las calles del municipio alavés, un sentimiento de angustia silenciosa, profunda, el de unos vecinos que no entendían cómo Cristóbal Martínez, teniéndolo todo, había acabado con la vida de Estíbaliz y, al mismo tiempo, había arruinado la suya propia y la de sus tres hijos.
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