Málaga tendrá por primera vez un plan urbano sin consenso político
Oposición y colectivos sociales censuran al PP la falta de diálogo sobre el plan
El consenso político que tradicionalmente había marcado el planeamiento urbanístico en Málaga se ha quebrado en la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), aprobada ayer por el pleno de forma provisional con los únicos votos de la mayoría absoluta que el PP tiene en la corporación. Los dos planes elaborados desde la restauración democrática habían contado siempre con un acuerdo político previo (1983, con gobierno de mayoría absoluta del PSOE, y 1997, con mayoría relativa del PP). Los reproches por esta falta de diálogo cayeron como un chaparrón sobre el equipo de Gobierno. Los reiteraron los dos grupos políticos de la oposición, que votaron contra el plan, pero también formaron parte del argumentario de las ocho organizaciones sociales que tuvieron palabra en el pleno.
"No es un plan de ordenación, sino pura calificación de suelo", dijo el PSOE
La oposición recibió los informes de los cambios minutos antes del pleno
Los portavoces de PSOE e IU lamentaron además que se eligiera para aprobar el PGOU una fecha en la que iba a tener poca trascendencia, en pleno mes de agosto y el día previo al inicio de la feria, y que los grupos no tuvieran el documento, que consta de 12.000 folios y 800 planos, hasta el pasado viernes. Es más, hasta minutos antes del pleno, la oposición no recibió los informes jurídico y técnico sobre el alcance de los cambios introducidos al documento desde la aprobación inicial, hace dos años.
"Han despreciado las formas, porque así anulan el debate social, lo han hecho de manera deliberada", denunció Pedro Moreno Brenes, de IU. El portavoz del PSOE, Rafael Fuentes, que aportó un escrito firmado por 230 colectivos que se quejan de la falta de diálogo, lamentó que una norma de tanto alcance para la ciudad "sea impuesta por los votos de una mayoría coyuntural, cuando tenía que ser el plan de todos los malagueños".
El concejal de Urbanismo, Manuel Díaz negó la mayor, y resaltó que la participación y el consenso son una de las características definitorias del plan, y dijo que prueba de ello es el elevado número de alegaciones presentadas, 6.765, de las que se han aceptado más de la mitad (3.450). Para la oposición en cambio, que haya muchas alegaciones puede obedecer justamente a que ha habido menos participación.
Díaz atropelló a la oposición: "no ha mostrado interés por hacer posible el consenso", sólo se ha preocupado por el PGOU de forma "atropellada" en el último mes cuando supo que se iba a aprobar ayer, "no han sido responsables" y hacen "pura demagogia" y "manipulan a los colectivos sociales por intereses partidistas".
El concejal de Urbanismo exaltó las bondades de un plan que dijo es "el mejor de la historia" y va a propiciar "una transformación sin precedentes para convertir a Málaga en una gran ciudad". Resaltó el "carácter social" del plan por su "apuesta por la vivienda pública". El 36% de las 32.000 nuevas viviendas serán de VPO.
Defendió como elementos de "vanguardia y modernidad" los edificios de gran altura que se proyectan, y que es uno de los elementos más polémicos del plan cuestionados por la oposición porque se localizan en zonas donde suponen un aumento de densidad de población ya elevadas. Para la oposición, en cambio, el plan deja mucho que desear, y obedece a intereses especulativos de particulares. Para el portavoz del PSOE, Rafael Fuentes, no es auténticamente un plan de ordenación, sino "pura calificación de suelo". "No hace ciudad y se olvida de los más importante, los barrios, que es donde vive la mayoría de la gente y donde no se interviene pese a que hay déficit de todo tipo". Frente a la grandilocuencia de las cifras de nuevas zonas verde, dijo que la mayoría están localizadas en las afueras, y no donde el ciudadano lo necesita. "En Miraflores un metro cuadrado es una necesidad y en el monte San Antón un millón de metros es natural", dijo.
El portavoz de IU cuestionó que el plan dibuja una expansión "ilimitada y desproporcionada a costa del suelo rústico y no hace justicia en los barrios". Los dos grupos de la oposición censuraron el empeño de mantener proyectos rechazados en el Plan de Ordenación del Territorio, de rango superior, como construir en Arraijanal y al norte de las rondas, o el puerto deportivo de El Moralco. "Saben que serán rechazadas, y lo mantienen para luego presentarse como víctimas de la Junta", dijo Moreno Brenes.
DATOS DEL NUEVO PGOU DE MÁLAGA
- Proyecta 70.116 viviendas, aunque realmente de nueva programación son 36.225, el 36% de ellas de VPO, porque el resto ya estaban contempladas en el plan vigente y no se han ejecutado aún.
Los nuevos desarrollos se concentran en la zona oeste, en las vegas de los ríos Campanillas y Guadalhorce, en Churriana, y en Puerto de la Torre.
Prevé 4,8 millones de metros cuadrados de suelo para actividades económicas y un millón para equipamientos y 7,6 millones de espacios libres, con una ratio de 11,2 metros por habitante.
Las nuevas infraestructuras proyectadas suman una inversión estimada en 1.100 millones de euros.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.