La Quincena fusiona música y naturaleza en Chillida Leku

Un año más, la Quincena Musical de San Sebastián, que arrancó el pasado lunes, llenará de notas el museo Chillida Leku los domingos de agosto. Esta vez, los artistas invitados han recibido el encargo de diseñar sendos programas que tengan en cuenta la naturaleza como fuente de inspiración de muchos músicos y a un autor que es ejemplo claro de esa relación: el francés Olivier Messiaen (1908-1992), a quien el festival homenajea en el centenario de su nacimiento. Además de compositor, Messiaen era ornitólogo y llevó a sus partituras la pasión que sentía por el canto de los pájaros.

El coro guipuzcoano Hondore abrirá el ciclo el próximo domingo. Bajo el título Música: naturaleza y poesía, interpretará diversas obras de Ravel, Fauré, Morten Lauridsen, Derek Holman y Eric Whitacre, cuyas melodías se funden con textos de escritores como Víctor Hugo, Rilke, Neruda u Octavio Paz en los que la naturaleza se encuentra muy presente. Así lo explicó ayer el director del coro, Jesús María Unanue, convencido de que han logrado configurar un programa "coherente", ya que, como recordó, Messiaen era un gran amante tanto de la naturaleza como de la poesía, dos grandes influencias a la hora de componer.

Dos coros y dos pianistas actuarán a lo largo de los domingos de agosto

El grupo francés de música antigua Ensemble Clément Jane-quin, bajo la dirección de Dominique Visse, tomará el relevo el día 17 con un programa titulado Le chant des oiseaux. Especializado en la interpretación a capela de la música del Renacimiento, el conjunto cantará piezas que se asemejan precisamente al canto de los pájaros, en un claro guiño a Messiaen.

El 24 de agosto llegará el turno del joven pianista luxemburgués Francesco Tristano Schlime, actualmente afincado en Cataluña, quien ofrecerá un programa bautizado La naturaleza según John Cage. Abordará algunas de las obras más significativas de este compositor norteamericano, como In a Landscape o The seasons, que intercalará con piezas de Bach. "Le gusta mezclar a compositores antagónicos para crear programas originales", subrayó Oihana Muguerza, adjunta a la dirección artística de la muestra musical donostiarra.

Otro joven pianista, el francés Bertrand Chamayou, cerrará el ciclo el día 31 con un recital que sumará obras de Messiaen con piezas de otros compositores como Liszt, Debussy y Ravel.

El director del museo, Luis Chillida, calificó de "acierto absoluto" la fusión de música y naturaleza elegida para esta ocasión, pues refleja dos de las grandes inspiraciones de su padre, el escultor Eduardo Chillida.