Salgado y Saura desencallan el traspaso de la Inspección de Trabajo

Primer gesto de distensión ayer entre el Gobierno central y la Generalitat tras tres días de reuniones para el desarrollo del Estatuto y de la nueva financiación, teñidas de pesimismo.

La ministra de Administraciones Públicas, Elena Salgado, y el consejero de Relaciones Institucionales, Joan Saura, certificaron el acuerdo para el traspaso de la Inspección de Trabajo a la Generalitat. Ambos dirigentes resaltaron "la cordialidad del encuentro" y se mostraron confiados en que en los próximos meses se podrán alcanzar más acuerdos. No se habló de financiación autonómica, carpeta reservada al vicepresidente económico, Pedro Solbes. El traspaso de la inspección laboral se materializará el 1 de junio de 2009.

En una "reunión políticamente intensa", según la parte catalana, también se alcanzó un acuerdo para ceder a la Generalitat los permisos iniciales de trabajo para extranjeros, aunque queda por reformar el Reglamento de la Ley de Extranjería. Ambas partes dejaron muy claro que otra cosa es la expedición del permiso de residencia, que seguirá siendo competencia exclusiva del Gobierno central. También la Inspección de la Seguridad Social seguirá dependiendo del Gobierno central.

Sin notícias de Cercanías

Otra cuestión que sigue en vía muerta es el traspaso de Cercanías de Renfe, aunque se reconocieron ciertos pero tímidos avances. No se ha llegado a entrar en ningún detalle, sólo se han confrontado levemente posiciones políticas.

La Generalitat esgrime dificultades a la hora de abordar cuestiones técnicas con el Gobierno. Salgado y Saura no cerraron ningún acuerdo en torno Cercanías porque la Generalitat sigue considerando "insuficiente" la propuesta del Gobierno central, explicó la misma ministra de Administraciones Públicas.

El calendario para el traspaso efectivo de la Inspección de Trabajo empezará el 31 de octubre, cuando se establezcan los mecanismos de cooperación entre los cuerpos de Inspección de Trabajo y los de Seguridad Social. Después, está previsto que el 15 de marzo de 2009 haya acuerdo sobre el total de medios humanos que deben pasar a la Generalitat. Finalmente, el 30 de abril se celebrará una comisión de transferencias para que el 1 de junio se pueda ejercer ya el traspaso de la competencias.

El único avance que constató la Generalitat fue "la buena voluntad" del Gobierno. Para que nadie dude de la buena sintonía, Salgado afirmó ayer que había dado "instrucciones" a los ministerios para que respeten las competencias del Estatuto. En lo que hace referencia al traspaso de la Inspección de Trabajo, que dispone de unos 400 funcionarios en Cataluña, la Generalitat agradece la sensibilidad del actual ministro de Trabajo, Celestino Corbacho.