Denuncia contra un alcalde por violación

La primera teniente de alcalde de Sierra de Yeguas (Málaga, 3.500 habitantes), Josefa Torres, denunció ayer al regidor del municipio y compañero del Partido Popular, Rafael Sánchez Lavado, por violación y acoso sexual, entre otros hechos. El PP tramita desde hace dos días la expulsión de sus filas de Sánchez Lavado, que por el momento se niega a abandonar su cargo. La concejal enseñó en su partido unas conversaciones grabadas que supuestamente prueban las vejaciones que dice haber sufrido desde hace cuatro meses. Fuentes del PP aseguran que la situación que ha vivido la edil era "terrible". El alcalde llegó ayer a toda prisa a la sede del Ayuntamiento. "Tengo poco que decir", avisó, con ojeras y cara de haber dormido poco. "Las acusaciones son falsas, es una trama política para desbancarme del poder de una vez por todas", sostuvo.

El regidor: "Era mi mano derecha y ahora me ha arruinado la vida"

Sánchez Lavado, casado y con tres hijos, repite con vehemencia que se siente traicionado: "Confié mucho en ella, era mi mano derecha. Ahora me ha arruinado la vida". No le consta que existan grabaciones que le inculpen y niega con rotundidad las acusaciones.

El pasado mes de diciembre, el alcalde fue condenado a un año de cárcel por un delito de agresiones. Se le conmutó la pena por 4.380 euros. En el procedimiento también fue condenado uno de sus hijos, Miguel Ángel Lavado, actual concejal popular. Él cree en la inocencia de su padre y afirma que Josefa Torres "está haciendo un uso fraudulento de la violencia de género".

Josefa Torres estuvo todo el día encerrada en casa de su hermana, en una pequeña vivienda situada a las espaldas del consistorio. La hermana señala que la concejal está muy afectada por lo ocurrido y que dejará su cargo en el Ayuntamiento en los próximos días. "Ha sido horroroso para ella, nadie debería pasar por esto", dice.

Carmen García, de 23 años, concejal popular en el municipio y que apenas lleva tres semanas en el equipo de gobierno, sostiene que Josefa le dijo por teléfono que su objetivo es que Sánchez dimita. "Cuando yo le dije que los ediles estamos con él, ella me dijo que Rafael no se va a salir con la suya", asegura.

El pequeño pueblo de la sierra norte de Málaga está conmocionado. Y dividido. Por la mañana se acercó a la sede municipal la bibliotecaria, quien esgrime que Sánchez Lavado le debe dinero a su marido; otra vecina clamaba a todo el que quisiera oírle que el denunciado le debe un millón de euros. Algunos de los vecinos consultados le tachan de agresivo y déspota, otros de buen alcalde, trabajador y un hombre de familia.

Mientras, el regidor sostiene tozudamente que no va a dejar su cargo, a pesar del decreto de expulsión de su partido y la denuncia por violación. "No quiero traicionar al pueblo. Ellos me pusieron y ellos serán los que me quitarán", reta Sánchez Lavado.

Denuncian a un alcalde por violación en Málaga