Ortigueira defiende el edificio que ocupa un castro

El Ayuntamiento de Ortigueira ha presentado un recurso contra la orden de la Dirección Xeral de Patrimonio, que le impone una multa de 24.000 euros y le obliga a restituir la legalidad urbanística por la construcción de un edificio de 67 viviendas dentro de la zona de protección de un castro. La licencia, según precisó el entonces regidor municipal, Antonio Campo, fue concedida en agosto de 2006 pero no por él, que en esas fechas se encontraba de vacaciones, sino por el segundo teniente de alcalde.

La beneficiaria de la licencia fue la inmobiliaria Os Celtas, de la que es socio José Campo, hermano del ex alcalde, quien delegó en otro concejal del equipo de gobierno la firma de la licencia. El Ayuntamiento de Ortigueira, gobernado por el PP, confía en que la restitución de la legalidad urbanística no signifique que se deba "realizar derribo de vivienda alguna". El recurso ante Patrimonio se acompaña de los informes del arquitecto y la secretaria municipales, que estimaron que no era necesaria la autorización de la Dirección Xeral.

Alegaciones rechazadas

Parte de las alegaciones del recurso ya fueron rechazadas en la fase de instrucción del expediente por la consellería, que apunta que el castro de Campo da Torre, al lado de las viviendas de Os Celtas, es un bien inventariado sujeto al régimen de protección legal. Según la Xunta, la construcción supuso "el incumplimiento de las obligaciones establecidas" en la citada ley, por lo que "tiene la consideración de infracción administrativa". La resolución se basa en un informe del arqueólogo de la delegación provincial de A Coruña, quien señaló que las obras afectan a la ladera del castro. El Ayuntamiento considera que la restitución de la legalidad se puede solventar con la autorización que exige Patrimonio.

"El impacto sobre el bien protegido se considera severo, ya que la distancia de las obras es inmediata al área de protección integral del castro, afectando gravemente a un aterrazamiento (...) por su vertiente norte, teniendo un efecto negativo, inmediato, irreversible e irrecuperable", añade el informe del arquitecto. Las alegaciones del ayuntamiento se basan en que la licencia se otorgó en suelo urbano de núcleo rural. Argumenta que existe un proyecto de control arqueológico de los accesos al Campo da Torre que obtuvo informe favorable de la comisión de Patrimonio Histórico de A Coruña.