Los fabricantes de automóviles temen una caída del 20% de las ventas este año

En su primera comparecencia ante los medios de comunicación, el recién elegido presidente de la Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac), Francisco García Sanz, señaló ayer que según sus cálculos, las ventas caerán un 20% a final de año y se situarán en torno a los 1,3 millones de matriculaciones. Se trata de la segunda revisión a la baja por parte de Anfac tras calcular en enero un descenso del 2% para el ejercicio de este año y del 9% en abril. Las previsiones para los vehículos comerciales son todavía más pesimistas, con caídas del 27% en los de más de 3,5 toneladas y del 30% en los de menos de 3,5 toneladas.

García Sanz, que se reunió el pasado miércoles con el ministro de Industria, Miguel Sebastián, no descarta otra revisión a la baja en octubre, una vez transcurridos los meses de verano.

Preguntado por la incidencia del Plan Vive, para la renovación del parque automovilístico, el presidente de Anfac destacó que se trataba "un gran esfuerzo de imaginación" por parte del Gobierno teniendo en cuenta sobre todo el entorno económico actual y el momento de restricciones presupuestarias por el que atraviesa.

Para García Sanz, éste va a ser un año duro, y ocurrirá lo mismo en 2009 si no se aplican las "medidas drásticas" necesarias. La clave para hacer frente a la situación pasa por "desarrollar ideas conjuntas con la Administración para generar consumo". De momento, el empleo en el sector no se verá afectado ya que las fábricas tienen prevista una producción de 2,9 millones de automóviles a final de año, de los que se exportará el 82%. Incluso esperan recuperar los 28.000 automóviles que han dejado de fabricarse en junio por la huelga de transportes.

En cuanto a la incidencia del Plan Vive, Anfac considera difícil, aunque no imposible, alcanzar la cifra de 240.000 automóviles beneficiados que calcula el Ministerio de Industria. Respecto a la actual guerra de precios entre las marcas generalistas, es difícil saber hasta donde puede llegar, según García Sanz.