Hombres con pasado
- Fidelidad. Jordi Portabella es concejal de ERC en Barcelona. Hace unos días era partidario de Josep Lluís Carod. Se le veía en cualquier acto que éste organizara. Tras el congreso, ha descubierto que nunca fue carodista. Y no ha tenido ni que comprarse chaqueta nueva. De los militantes de ERC, es el que más tiene. Fue colomista, fue carodista y ahora es puigcercocista. Y hay quien asegura que sólo ha sido siempre portabellista.
- Seriedad. La fidelidad de Portabella no se agota en el interior del partido. Sabe bien de ella el dirigente de CiU, Xavier Trias. Pactó con el concejal republicano una moción para frenar la campaña Visca Barcelona. El pacto duró hasta que hubo que votar. En ese instante, Portabella miró para otro lado y dejó a Trias con la misma indiferencia con la que antes había abandonado a Carod.
- Apellido frecuente. Una convocatoria de CiU empezaba así: "El concejal de Seguridad de Convergència i Unió, Eduard Freixedes". La lectura dejaba a cualquiera perplejo porque en las listas de CiU no había nadie con ese nombre y apellido. Pero un asterisco remitía a la siguiente nota: "El concejal de CiU Eduard Garcia se ha cambiado el nombre y desde el pasado 1 de junio se llama Eduard Freixedes". Misterio despejado.
- Patriotismo de ocasión. Joan Laporta está amenazado por una moción de censura por la escasa eficacia de su trayectoria como presidente del club: dos ejercicios con alto gasto y sin un mísero título. Pero él ha descubierto la verdad de la vida y ha decidido que lo mejor es envolverse en una bandera, ni siquiera la del club. Su última comparecencia la terminó con un "¡Viva Cataluña Libre!", como si él fuera eficiente o no tuviera algo que ver con el resto de los catalanes.
- Palabras. En Cerdanyola, un grupo ecologista (escorado hacia ERC) anda a la greña con el alcalde de ICV, Antoni Morral. Lo acusa de ponerse de acuerdo con un obispo para impedir una charla sobre un vertedero. Morral ha hecho cosas raras en su vida, pero no se entiende demasiado bien por qué los ecologistas prefieren creer en la palabra de un obispo que en la de su alcalde.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.