El vértigo de emprender para un alto sueldo
PREGUNTA. Tras 12 años en el área de márketing, donde he desarrollado una carrera exitosa en varias empresas, me siento bloqueado en mi actual puesto de director del departamento en una importante editorial, integrada en una multinacional, en el que llevo tres años. El problema es que mi salario, bastante alto para mi categoría, hace que sienta miedo a dar el salto hacia lo que realmente me atrae, montar mi propia consultora. Sobre el papel, me salen los números para vivir holgadamente como pequeño empresario, aunque siento pánico a dejar una carrera de directivo que me asegura un nivel de vida alto, aun a costa de mucho estrés. Paso noches sin dormir pensando en que las cosas me pueden salir mal y para colmo mi mujer es partidaria de no correr riesgos. Pero si no lo hago, creo que me arrepentiré toda la vida. ¿Cuál es el enfoque correcto ante esta disyuntiva? J. C. F. Barcelona
Intente montar su proyecto con el apoyo familiar o acabará frustrado
RESPUESTA. Si en su fuero interno está convencido de que debe intentarlo, es prácticamente inevitable hacerlo. Sin embargo, una vez que haya tomado la decisión, la puesta en marcha de su proyecto exige una cuidadosa preparación en varios frentes.
En primer lugar, en el entorno familiar. Hable con su esposa, expóngale sus razones y negocie con ella los cambios que implicará en su estilo de vida, dejando claro que está dispuesto a pagar el precio que puede conllevar antes que continuar en la situación actual. Procure que su entorno familiar sea su mayor soporte, así como una parte fundamental de su proyecto. Hágale ver que, más que un problema, puede ser una oportunidad, y que si no alcanza sus objetivos siempre le quedará la opción de retomar su carrera anterior. El hecho en sí de emprender una nueva actividad exigirá mucho esfuerzo y concentración; es imprescindible que cuente con apoyos que le permitan afrontar este periodo y concentrar todos los esfuerzos en conseguirlo.
En segundo lugar, realice una planificación objetiva y realista de las oportunidades de negocio. Un escenario A con las mejores previsiones y una opción B con el peor escenario posible, tanto desde el punto de vista financiero como de gestión de clientes. Empiece la actividad teniendo en cuenta estos puntos y siendo transparente con su familia, no transmitiéndole miedo e inseguridad, pero sí compartiendo la información.
Al final todos estarán de su parte pues, al fin y al cabo, los errores que cometemos por intentar algo podrán corregirse. Por el contrario, los errores que creemos evitar por no intentarlo no se transforman en experiencia, si no en frustración, que es algo peor que el fracaso.
Sonia Pedreira es consejera delegada de Ray & Berndtson.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.