Quintana ofrece un pacto a Zapatero para dar estabilidad frente a la crisis

El portavoz nacional del BNG, Anxo Quintana, manifestó ayer la disposición del nacionalismo gallego a negociar y firmar un acuerdo estable de colaboración con el PSOE que contribuya a dar estabilidad al Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Apenas 24 horas después de que una votación en el Congreso pusiese en evidencia la soledad del Ejecutivo, Quintana aprovechó una rueda de prensa celebrada en Santiago en compañía del secretario general de Convergència Democrática de Catalunya (CDC), Artur Mas, para confesar su "perplejidad" porque el PSOE todavía no haya sido capaz de "leer el resultado electoral".

BNG, CiU y PNV aún no decidieron si irán en coalición a las europeas

"El PSOE comete un error, vive en una ensoñación, si piensa que puede gobernar como si tuviera mayoría absoluta sin tenerla", subrayó el jefe de filas del Bloque.

Quintana relacionó la necesidad de un acuerdo, que el Bloque viene buscando desde la celebración de las elecciones del 9 de marzo, con la "crisis económica". El también vicepresidente de la Xunta utilizó expresamente este término (rechazado por el presidente Emilio Pérez Touriño, que sigue hablando de "desaceleración") para describir la situación de la economía española. La crisis, que mantiene "preocupados a los ciudadanos", dijo, hace "imprescindible" la búsqueda de acuerdos de estabilidad. "Lo que no se puede hacer es no gobernar, no dar la cara", advirtió. "Pedimos que dé la cara y afronte la crisis con valentía" y para eso puede contar, dijo, con el BNG y también con Convergència i Unió (CiU).

Artur Mas no fue tan directo a la hora de ofrecer un pacto estable al PSOE (entre otras cosas por las dificultades que implicaría, señaló, apoyar a los socialistas en Madrid y hacer oposición en Cataluña), pero estuvo de acuerdo en que el Gobierno se está "dando de bruces con la realidad" de la situación económica. Durante meses hablaron de "un resfriado" pero ya es evidente que hay síntomas "de fiebre" y es necesario iniciar un tratamiento. No obstante, señaló, BNG y CiU tienen ideas para hacer frente a la crisis y los nacionalistas catalanes están dispuestos a prestar su apoyo en temas concretos cuando sea necesario.

Ambos líderes destacaron que sus respectivas formaciones fueron capaces de resistir electoralmente el embate bipartidista de las últimas elecciones generales, cuyo resultado ha vuelto a otorgar al nacionalismo "carácter decisivo".

Además de ofrecer un pacto, Quintana recordó la apuesta del Bloque por el desarrollo del Estatuto de Autonomía y por la transferencia de nuevas competencias mediante el mecanismo de delegación previsto en el artículo 150.2 de la Constitución. El portavoz de los nacionalistas gallegos pidió al presidente Rodríguez Zapatero que sea "coherente". "Si para desarrollar el autogobierno lo que exige es apoyo parlamentario y consenso ciudadano, lo que debe hacer es apoyar públicamente el traspaso a Galicia de las competencias de tráfico y seguridad vial porque se trata de una demanda unánime de las fuerzas políticas y de la sociedad gallega", dijo.

En el mismo sentido se expresó Artur Mas, según el cual el Gobierno pretende reforzar el Estado central en detrimento de los Gobiernos autónomos. El dirigente de Convergència recordó que Cataluña sigue pendiente de lo que pueda decidir el Tribunal Constitucional sobre el Estatuto.

Un Tribunal "peleado y mediatizado por los partidos estatales" que tiene en sus manos poner en tela de juicio la decisión democrática de todo un pueblo. "Una sentencia negativa", subrayó Mas, "cuestionaría toda la vía estatutaria de Cataluña".

Los líderes de BNG y CDC valoraron la coalición en la que, junto al PNV, participaron en las elecciones europeas de 2004, pero no quisieron adelantar si la repetirán el año próximo. Los tres partidos tendrán ocasión de explorar esta posibilidad el próximo 24 de julio en Santiago, durante la celebración del 75º aniversario de Galeuscat.