Tres heridos en Estivella por manipular pólvora

Hubo una fuerte explosión y después cuatro más flojas, narraba ayer una vecina. Fue pasadas las 23.00 del sábado en un chalé de tres alturas enclavado a las afueras de Estivella, donde los tres miembros de una misma familia se encontraban, supuestamente, manipulando material pirotécnico para la elaboración "ilegal y clandestina" de masclets, manifestó ayer el alcalde de la localidad valenciana, Roberto Renau.

A raíz de la explosión, el padre, de 65 años, resultó herido de gravedad, con quemaduras en el 70% del cuerpo. Su esposa, de 62 años y su hija, de 28, que se encontraban en la planta baja de la casa, también resultaron heridas.

El hombre se hallaba en el momento del suceso en la planta ata alta de la casa elaborando supuestamente estos petardos. El estallido le provocó quemaduras en el tronco y en las piernas, además de un golpe en la cabeza, por lo que fue trasladado por el SAMU al Hospital La Fe de Valencia. Las dos mujeres fueron trasladadas al cercano Hospital de Sagunt. La mujer mayor presentaba un traumatismo en el tronco y la joven sufrió una fractura en la tibia.

Hasta el lugar de siniestro acudieron dos vehículos de Bomberos del Parc de Sagunt. Los agentes estuvieron trabajando en la casa hasta la una y media de la madrugada.

El alcalde de Estivella explicó ayer que muchos vecinos pudieron escuchar la explosión y que los heridos son un matrimonio y su hija que acudían al chalé siniestrado "con frecuencia". El edificio quedó muy dañado, con varios tabiques arrancados y muebles esparcidos por los alrededores. Al parecer salieron despedidos del inmueble a causa de la fuerte explosión.

Según Roberto Renau, "afortunadamente" el chalé se encuentra ubicado a la salida del pueblo, en la subida al castillo de Beselga, y "está aislado" del casco urbano, por lo que se han evitado males mayores. El primer edil, que siguió de cerca el siniestro, subrayó que había más cajas con material explosivo que no se vieron dañadas por el suceso y que ni los vecinos ni el propio Ayuntamiento sabían nada.