Dos trenes de obras chocan durante los trabajos en una vía

No eran de pasajeros ni transportaban mercancías, pero dos trenes volvieron a chocar anteayer en las vías férreas catalanas. La colisión de dos locomotoras de obras, propiedad de la unión temporal de empresas (UTE) Martorell-Olesa, se produjo entre las estaciones de Martorell Enllaç y Abrera, en un tramo común de las líneas R5 y S4 de Ferrocarrils de la Generalitat (FGC), a una velocidad de unos 10 kilómetros por hora. El impacto no generó mayores daños por puro azar: algunos trabajadores señalaron que los conductores de ambas máquinas pudieron haber corrido peor suerte. No fue así y, dada la "irrelevancia del accidente", FGC no informó del siniestro.

La empresa recalcó que la incidencia queda fuera de su incumbencia, puesto que el choque se produjo durante los trabajos de desdoblamiento que se están realizando en ese tramo de las vías. "Ni la vía ni la maquinaria son nuestras. Hasta que terminen los trabajos, no somos responsables de la infraestructura", precisó un portavoz de FGC. Éste achacó la responsabilidad a la UTE que realiza las obras.

Martorell-Olesa, que agrupa a las constructoras Dragados, Tecsa y Sorigué, recordó que la potestad en los trabajos corresponde siempre a la empresa contratante. De hecho, las locomotoras de obras operan o no en la vía según la carta de maniobras que regula Ferrocarrils. Nadie pudo aclarar las causas del accidente ni garantizar, por tanto, que no vuelva a ocurrir. Un portavoz del Departamento de Política Territorial destacó que los trenes de FGC no operan en esa vía y rechazó que el incidente pueda atribuirse a ningún descontrol por parte de Ferrocarrils.

Hace dos semanas, la colisión entre dos trenes de pasajeros de FGC, en hora punta de la mañana, dejó a unos 30.000 usuarios sin servicio. El incidente estuvo a punto de suceder en otras dos ocasiones el pasado mes de mayo. Dos trenes de mercancías quedaron a escasos metros de chocar en Masquefa. Dos días después, el incidente se repitió en Sant Vicenç de Castellet, en ambos casos en la línea del Baix Llobregat. FGC atribuyó ambos incidentes a un error humano.