Movilidad impedida

Son muchas las quejas relacionadas con las dificultades que tienen las personas con movilidad reducida para moverse en transporte público. Renfe es un purgatorio para estos usuarios, pero Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), que explota el metro y los autobuses, no le va a la zaga. Se ha invertido dinero en autobuses adaptados y en ascensores y escaleras mecánicas en el metro, pero sigue habiendo dificultades, a veces mecánicas, y no sólo ésas.

P. I. cuenta su caso. El 27 de abril, domingo, pretendía ir en metro desde Trinitat Vella hasta el paseo de Gràcia en la línea 4. Iban cuatro mujeres ("cuatro generaciones", explica ella misma). La mayor, en silla de ruedas, y la niña, en cochecito. Sin temor porque ambas estaciones están dotadas de ascensor. Llegaron a Passeig de Gràcia y se encontraron el viejo cartel de "no funciona" adaptado a los tiempos presentes: "Fora de servei".

Tras buscar ayuda (TMB dice que basta con apretar un botón; pero, salvo la dirección de TMB, casi todo el mundo sabe que no es verdad) consiguieron dar con un vigilante de los que no logran evitar que la gente no pague o que no fume. El hombre decidió que aquello era cosa del jefe de estación y consiguió encontrarlo. Cuando al fin llegó, les dio la solución: cambiar de andén y de estación. En la de Girona hay ascensor. Pero no se podía cambiar de andén porque no funcionaba el ascensor. Quedaba otra solución, ir pasando estaciones hasta que una tuviera un ascensor que funcionase. A las cuatro mujeres les pareció una solución horrorosa y decidieron arriesgarse a las escaleras mecánicas. Ninguno de los dos empleados del metro les echó otra cosa que no fuera una mirada y el jefe de estación, además, les recordó que eso estaba prohibido. Un par de personas que pasaban por allí les echaron una mano.

TMB reconoce los hechos, lo que no deja de ser sorprendente, porque no acostumbran a dar la razón al usuario. Más allá de eso, nada. La empresa ni siquiera ha sabido explicar (casi un mes más tarde) por qué el ascensor estaba fuera de servicio. Y es que al usuario eso ni le importa.

Para quejas sobre las administraciones y empresas públicas, pueden dirigirse a catalunya@elpais.es, a la atención de Francesc Arroyo.