El alcalde de Tarragona vuelve a abrir el grifo
El alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros (PSC), declaró ayer que volverá a permitir hoy mismo el uso de agua de los seis pozos tarraconenses para cargar el barco que la traslada a Barcelona, una vez que la reforma del decreto de sequía garantiza que el agua será para uso de boca y no para llenar piscinas o regar jardines.
El alcalde de Tarragona, Josep Félix Ballesteros (PSC), declaró ayer que volverá a permitir hoy mismo el uso de agua de los seis pozos tarraconenses para cargar el barco que la traslada a Barcelona, una vez que la reforma del decreto de sequía garantiza que el agua será para uso de boca y no para llenar piscinas o regar jardines. Ballesteros avisó, no obstante, de que el control del destino del caudal que cede Tarragona de sus acuíferos será permanente y exhaustivo.
El agua de los pozos de Tarragona complementa las extracciones del Ebro, que son las que se envian a Barcelona en barco. Los 70 municipios del Consorcio de Aguas de Tarragona tienen contratados 120 hectómetros cúbicos de anuales de agua, que les llegan a través del minitrasvase, pero sólo utilizan 80 hectómetros.