Eguskiza disputa su última baza

José María Vázquez Eguskiza, presidente de la patronal vizcaína, Cebek, apura sus últimos cartuchos para acceder a la presidencia de la patronal vasca, Confebask. Oficialmente, su candidatura todavía no se ha presentado, pero en medios empresariales se da por seguro que Eguskiza, de 62 años y próximo al PNV, aspira al cargo. Las sospechas se basan en su trayectoria.

Lleva diez años al frente de la patronal vizcaína y ya en 1998, cuando los empresarios alaveses dudaron sobre presentar un candidato a la presidencia de la organización confederal, se postuló para el cargo. Finalmente, Román Knörr, el candidato del SEA, ocupó el puesto.

Cebek asegura que su propuesta está abierta al debate en Confebask

Vázquez Eguskiza volvió a postularse hace tres años. Cebek abogaba por romper el turno rotatorio histórico entre las organizaciones territoriales. El apoyo de Álava a la candidatura del guipuzcoano Miguel Lazpiur frustró el intento. Ahora ha vuelto al ataque, aunque fuentes empresariales aseguran que no cuenta con el apoyo unánime de la patronal vizcaína.

Enfrente tiene a Lazpiur y a su territorial, Adegi, que han manifestado su voluntad de repetir en el cargo, como ha sido costumbre. Cebek dice que lo bueno sería romper la dinámica actual y que corresponde a su territorial ocupar la plaza. La solución está una vez más en manos de la patronal alavesa, SEA, que todavía no ha analizado oficialmente la situación y trata de recuperarse de su propia crisis interna. Los empresarios alaveses parece que se decantan por mantener el statu quo actual, aunque no hay pronunciamiento.

Cebek quiere ceñirse al comunicado oficial del pasado martes. Asegura que han hecho una propuesta que debe estudiarse en los órganos de decisión de Confebask. El Consejo General de la patronal vasca está formado por 32 miembros, diez de cada territorial y dos de la confederación. El elegido elección necesita forzosamente el apoyo de dos territoriales. Hasta ahora, pese a los intentos de asalto al poder por parte de Vizcaya, siempre se ha mantenido hacia el exterior la apariencia de unidad.

La clave de este consenso hay que buscarla en la figura del secretario general de Confebask, José Guillermo Zubía, que ocupa el cargo desde 1995. A Zubía, de 62 años le queda un mandato presidencial para alcanzar la jubilación y en los últimos años se ha convertido en una especie de extintor para sofocar los incendios de las patronales territoriales.

Ha jugado un papel fundamental para mantener la cohesión de Confebask tras el desgaste que supuso al colectivo empresarial su pronunciamiento público en 2002 contra el plan Ibarretxe. Desde entonces, los empresarios han mantenido un perfil político hacia el exterior y una alta discusión política en sus organizaciones.