_
_
_
_
Reportaje:El Dos de Mayo: los descendientes

"Soy un hombre enamorado de Francia"

Dos descendientes de Malasaña y Velarde recuerdan a sus antepasados

El tiempo lo cura todo: "Estoy casado con Doris Biallet, francesa; mis hijos, Miguel y Diego, estudiaron en el colegio Molière de Zaragoza y tienen doble nacionalidad hispano-francesa; en cuanto a mí, soy un enamorado de Francia y de su civilización", dice Ricardo Vázquez Prada Oñoro, escritor, de 65 años, descendiente de la familia materna de Manuela Malasaña Oñoro. De 15 años, hija de Marcela Oñoro y del panadero Juan Malasange -hijo de un oriundo de Mialet, en Clermont (Francia), castellanizado Malasaña-, ella murió a manos de soldados franceses el Dos de Mayo de 1808. Vecina de la calle de San Andrés, se cree que fue asesinada al descubrir que portaba consigo unas tijeras. "Mis padres me contaron su historia siendo niño", dice Vázquez Prada, laureado con la medalla francesa de la Orden del Mérito.

Los franceses saquearon la casa del capitan Velarde en Muriedas

"Pueblo y ejército españoles dejaron a un lado diferencias y se unieron para luchar juntos en defensa de la patria; eso fue lo más bello". Quien así habla es María Velarde Pujadas, residente en Madrid, descendiente de Julián, hermano de Pedro Velarde, capitán de Artillería, héroe del Dos de Mayo. En su defensa del parque de Monteleón, el artillero entregó su vida junto con Luis Daoiz, antepasado del poeta sevillano Manuel Halcón Villalón-Daoiz (1902-1989). Daoiz y Velarde fueron nombrados condes a título póstumo en 1852 y 1855.

Hace mes y medio, María Velarde ha perdido a su padre, Alfonso, conde de Velarde, de 91 años. "Era el último artillero de cuatro generaciones que siguieron la estela militar del héroe", dice su hija. "Siempre nos dijo que nuestro antepasado, pese a su juventud -murió a los 28 años- fue un hombre culto, dominó cuatro idiomas y, entre otros hallazgos, descubrió un error de balística que corrigió con sus cálculos". Y la descendiente de Velarde añade: "Cuando los franceses le mataron en Monteleón, le despojaron de su uniforme; unos paisanos le cubrieron con tela de tienda de campaña y luego, con un hábito de fraile. Además de todo, la casa solariega de los Velarde en Muriedas, cerca de Santander, fue saqueada por los franceses".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_