Fernández Díaz logra en dos días los avales para desafiar a Sirera
El presidente local de El Masnou, destituido por apoyar a Nebrera
Alberto Fernández Díaz advirtió de que le disputaría la presidencia del PP catalán a Daniel Sirera y ha cumplido su palabra. Tan sólo dos días después de hacer pública su amenaza ya ha conseguido los avales suficientes (218) para que su candidatura tenga validez oficial con vistas al congreso de julio. El actual presidente del grupo del PP en el Ayuntamiento de Barcelona lo anunció ayer, justo el mismo día en que Sirera comunicaba también que ha sobrepasado el mínimo necesario de firmas para optar de nuevo al cargo. En total, 380, provenientes de compromisarios de la provincia de Barcelona.
La competición se basa en conseguir mayor número de avales de los 1.090 compromisarios que asistirán al cónclave popular. Porque quien sume más firmas puede hacerse con la presidencia, aunque ello abra una profunda división entre la militancia.
La tercera en disputa, Montserrat Nebrera -de la órbita del ex líder regional Josep Piqué-, va abriéndose camino poco a poco y los avales de su candidatura van cayendo con cuentagotas. Nadie de su círculo ni ella misma ha dado a conocer el número de apoyos, por la sencilla razón de que todavía no alcanza el mínimo necesario.
Nebrera ha logrado el respaldo de todos los compromisarios de El Masnou (Maresme), lo que le ha costado el cargo al presidente local, Lluís Tejedor, como secretario general del partido en la comarca. Al menos eso es lo que ayer denunció en un comunicado. Según la versión de Tejedor, el miércoles por la noche recibió una llamada telefónica del presidente del PP en el Maresme y concejal en Sant Andreu de Llavaneres, Víctor Ros, que le comunicó su destitución del cargo por bendecir la candidatura de Montserrat Nebrera.
Ni la dirección regional ni la provincial del PP, en manos de Daniel Sirera y de Dolors Montserrat respectivamente, respaldaron ayer la decisión de Ros. Fuentes próximas a Sirera la calificaron de "intolerable". Montserrat, perteneciente como Ros al sector fernandista, hizo gestiones durante toda la tarde de ayer para que este último recompusiera sus relaciones con Tejedor y diera marcha atrás a su decisión. "En el partido hay total libertad para apoyar una u otra candidatura y no tiene por qué haber presiones de ningún tipo", señaló un portavoz cercano a Dolors Montserrat.
Tejedor, sin embargo, desmintió estas gestiones y para hoy ha anunciado una conferencia de prensa para denunciar "una maniobra injusta y de presión por haber dado nuestro apoyo a Nebrera", señaló en declaraciones a este periódico.
Con todo, tanto Sirera como Fernández Díaz dicen contar con la bendición de Mariano Rajoy. Alberto Fernández señaló ayer en TV-3 que Rajoy apoya a todos los candidatos por igual y denunció los "bandazos" ideológicos de Sirera.
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