El ojo de la preguerra

En 1924, la recién creada Compañía Telefónica copió un modelo de trabajo que utilizaba ITT, su empresa matriz: contratar a fotógrafos de prestigio para que plasmaran los paisajes de cables con el fin de corregir su ubicación. Entre aquellos fotógrafos se encontraba Luis Ramón Marín.

Cuando Telefónica, muchos años después, expuso aquellas fotos digitalizadas, un nieto de Marín ofreció a la empresa el fondo de más de 18.000 negativos que poseía la familia con imágenes del periodista gráfico madrileño. Ahora, una selección de 209 instantáneas, tomadas entre 1908 y 1940, se exponen en el IVAM como testimonio de una época de quema de conventos, bailes reales, políticos sonrientes, revueltas callejeras y rostros quebrados por el trabajo diario. Marín, el ojo público de la España de la preguerra civil, retrata con precisión periodística un tiempo convulso a través de su cámara, testigo activo de un país tan lejano en sus comportamientos como cercano en sus gentes. La obra de un fotógrafo que se ha convertido en emblema de los reporteros gráficos que la guerra se llevó.