_
_
_
_
Reportaje:

Un bombardeo de signos

El Museu Serralves inaugura la muestra 'Violencia institucional y poética' - Tres jóvenes creadores proponen una reflexión sobre la opresión cotidiana

Una señal marca el sentido de subida o bajada de una escalera. Un póster en el metro invita a prestar atención a cualquier indicio de un posible atentado terrorista. Incluso el propio lenguaje. La cotidianidad es un bombardeo de signos, textos o situaciones que nos condicionan. Hay que ir por aquí; actuar de una determinada manera... Además de todo esto, lo cotidiano es la materia prima que inspira las obras de la francesa Anne-Lise Coste, la alemana Tatiana Doll y el holandés Eric van Lieshout, tres artistas que estos días coinciden en la exposición Violencia institucional y poética, inaugurada el viernes en el Museu Serralves de Oporto.

Se expresan en medios diferentes, pero los tres tienen algo en común: se apropian de la dictadura de las convenciones, la metabolizan (Van Lieshout en vídeos; Coste y Doll en pinturas) y la devuelven en piezas que revelan una naturaleza opresiva que no siempre es evidente, tan asimilada como está.

Según el comisario de la muestra y director adjunto del museo portugués, Ulrich Loock, los que integran la muestra son actos de "violencia poética" porque hacen que aflore algo reprimido. Van Lieshout busca contextos en los que él, como protagonista de sus vídeos, es el catalizador que hace explotar una tensión latente. Puede ser el colonialismo y sus efectos, como en Lariam (2001); la opresión familiar -Up! (2005)-; la sumisión cultural que trata de vencer una joven china en Fantasy me (2005); o, como en Rock (2007), los clichés sociales de una familia de nuevos ricos.

Tatiana Doll desvela la naturaleza asfixiante de los pictogramas que, supuestamente, ordenan el comportamiento social en lugares públicos. El aparentemente inofensivo indicativo de una sala de espera, sin ir más lejos. La técnica de Doll, que reproduce esos mensajes gráficos en pinturas de gran formato, deja al descubierto su verdadero significado. Estremece la reproducción de un póster que empapeló el metro de Nueva York y en el que la imagen de un pastor alemán se acompaña de la leyenda "Usted use sus ojos. Él usará su nariz".

Anne-Lise Coste se rebela contra el lenguaje, la más necesaria de las convenciones. Sus dibujos sobre papel y sus murales reinventan las reglas de la caligrafía para convertir "frases en dibujos y dibujos en frases". En ellos, la crítica política o social se mezcla con las emociones. Escribe frases como "merde à la police" ("mierda para la policía") o "I can't stand any longer" ("no lo puedo soportar más"). Y éstas funcionan como pensamientos fragmentarios de dolor, miedo o desesperación que, inconexos, reflejan la frustración de la artista por tener que usar un medio para expresarse que se revela insuficiente. "Yo rebusco entre las palabras", dice Coste. Hasta que el medio de comunicación se convierte en medio de incomunicación. Es el punto en el que las palabras ya no brotan. El punto en el que el lenguaje demuestra toda su inutilidad.

Obras de Tatjana Doll (arriba) y Anne-Lise Coste (abajo).
Obras de Tatjana Doll (arriba) y Anne-Lise Coste (abajo).

Babelia

Las novedades literarias analizadas por los mejores críticos en nuestro boletín semanal
Recíbelo

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_