El PNV exige al PSE que deje de "insultar" al 'lehendakari'

El PNV no aguanta más. La gota que ha colmado el vaso son las duras palabras de Ana Iríbar, viuda de Gregorio Ordóñez, dirigente del PP asesinado por ETA en 1995, contra el lehendakari y la descripción de Ibarretxe realizada por el líder socialista, Patxi López, como un presidente desaparecido ante los problemas del país, "apagado o fuera de cobertura". Ambas críticas fueron realizadas el sábado pasado, como colofón de una semana en la que el PNV se ha sentido "linchado" por negarse a apoyar una moción contra la alcaldesa de Mondragón, de ANV.

Ayer Andoni Ortuzar, máximo dirigente peneuvista en Vizcaya y hombre de confianza del líder Íñigo Urkullu, acusó a los socialistas de "insultar" con un estilo "faltón y barriobajero". Ortuzar advirtió al PSE-EE de que es "incompatible" que el presidente en funciones Zapatero diga que quiere "una relación preferente" con el PNV y que "sus subalternos se dediquen" en Euskadi a "manchar nuestro buen nombre". A la viuda de Ordóñez la acusó de ser "muy injusta" con el lehendakari, hacia el que la víspera Iribar había expresado "desprecio" por su actitud "cobarde e hipócrita" en relación con ETA.

El socialista Rodolfo Ares ve "muy nervioso" al PNV, partido que, replicó, "confunde crítica con descripción de la realidad". Ares mostró respeto a las palabras de Iribar por su condición de "víctima".