Ebro Puleva, entre poderosos

En el mundo hay 250 marcas de productos de consumo que son poderosas por el volumen de sus ventas, que tienen al menos diez cifras. Entre ese cuarto de millón, se han colado Ebro Puleva, la única firma española, según un informe de Deloitte, con una facturación tan potente como para codearse con los poderosos del supermercado.

Algunas venden refrescos, otras productos electrónicos y varias tabaco. Cada una es líder en su sector, y entre las 250 firmas de consumo con más ventas del mundo acumulan 186 billones de euros de facturación en 2006, año de referencia para realizar el estudio. El sector del consumo marchó bien, y reflejo de ello es el crecimiento medio de las ventas en las firmas del sector, del 8,4%.

Las ventas las marcas de consumo más fuertes del mundo crecieron de media un 8,4% y facturaron entre todas 186 billones de euros

La medalla de oro en el top 250 se la lleva el grupo Altria. Esta compañía estadounidense, antes conocida como Philip Morris, distribuye comida, bebida y tabaco. Entre sus marcas más conocidas en España, el tabaco Marlboro o los alimentos Kraft. Su volumen de ventas fue de 101.407 millones de dólares en 2006 (64.506 millones de euros). Las firmas que le siguen son muy reconocidas e todo el mundo: Hewlett-Packard, Samsung o Nestlé.

Sólo dos de toda la larga lista llevan asociado en el país de origen España. Son Ebro Puleva y Altadis. Ésta segunda, que controla tabacos como Fortuna, Ducados o Nobel, ya no es sin embargo española. La marca nacida de una fusión hispano-francesa, es ahora propiedad del grupo británico Imperial Tobacco.

Con Ebro Puleva, sin embargo, no hay duda. Es el primer grupo del sector de la alimentación en España por facturación, beneficios, capitalización bursátil y presencia internacional, según la propia empresa. Presume de ser líder mundial en el sector del arroz y es el segundo mayor fabricante de pasta del planeta. Toda esta diversidad de buenas posiciones le han proporcionado el puesto 196 en la lista de los más poderosos del consumo, con una facturación en 2006 de 3.076 millones de dólares (1.956 millones de euros al cambio actual).

"Para nosotros es una gran satisfacción", comentaba una portavoz de la empresa. Ese año las cifras fueron especialmente buenas, porque "se vendieron los negocios de Centroamérica y activos no operativos, lo que generó plusvalías". En 2007 sus beneficios cayeron a la mitad, pero la facturación aumentó un 9,4%. "No estamos preocupados porque en un escenario tan difícil como el que ha vivido el mercado mundial de la alimentación, nuestra empresa ha demostrado la solidez de su modelo de negocio", explican en Puleva.

El estudio comcluye que el sector de los productos de consumo marcha bien. En general, las ventas crecieron de media un 8,4%. Sin embargo, las empresas africanas y de Oriente Medio tuvieron un impulso mucho mayor. Son muchas menos (sólo cinco entre las 250, frente a las 90 de EE UU), pero juntas lograron un avance en las ventas del 14,3%, frente al 7,4% de las firmas norteamericanas. "

Las firmas de EE UU y Europa occidental operan en un mercado maduro, mientras que las de mercados emergentes crecen rápidamente", explica la consultora. Los cambios en la economía mundial proponen un nuevo reto para las marcas clásicas, que deberán hacer un esfuerzo para seguir en la cima. "Las que se limiten al viejo mundo, podrán verse inmersas en un periodo de restricciones", vaticina Deloitte.