Desaparece un menor de 15 años en un pueblo de Málaga

Unas doscientas personas, entre vecinos, compañeros de colegio y familiares, se concentraron ayer en Canillas de Aceituno (Málaga, 2.336 habitantes) para solicitar la vuelta a casa de Manuel Marín Hidalgo, el joven de 15 años que desapareció el pasado lunes en torno a las 17.00.

El joven fue visto por última vez en el municipio y estaba acompañado por un primo suyo. Vestía un pantalón oscuro, una camiseta de rayas azules y amarillas y una chaqueta oscura. Manuel salió de casa sin dinero, sin móvil y sin documentación. El joven si se llevó consigo las llaves de su casa, que nunca solía coger. Esto hace pensar a su entorno que la desaparición del menor ha sido voluntaria.

El padre del joven desaparecido, Manuel Marín Cubo, ex alcalde Canillas de Aceituno, ha ido a Málaga a revisar grabaciones de un centro comercial donde, al parecer, el joven había sido visto. "Llevamos unos días mirando cintas, pero no hay nada", señaló a Efe el progenitor. "Si alguien tiene a Manuel, por favor, que lo diga porque es un niño", pidió.

Dentro del operativo de búsqueda se han repartido fotografías del joven con teléfonos de contacto en municipios de Málaga y se han pegado carteles en paradas de autobuses.

Su madre, María Jesús Hidalgo, también pidió a su hijo que vuelva porque están "destrozados". "Lo que quiero es por lo menos dé noticias de que está bien". Una de las tías del joven, Pepa Hidalgo, pidió al adolescenteque no sienta miedo, vergüenza o apuro por lo sucedido y que vuelva junto a ellos.

María del Carmen Marín, otra tía, ha comentado que la incertidumbre les está "matando", sobre todo a su madre, a la que "las noches se le hacen muy duras". La familia ya han necesitado dos veces la atención de un equipo de psicólogos.

El alcalde del municipio malagueño de Canillas de Aceituno (Málaga), José Manuel Aranda, pidió que no se relajase la investigación e indicó que el Ayuntamiento y el pueblo, que están "volcados" con la familia del joven, van a hacer "todo lo que sea necesario hasta que el niño aparezca".

El regidor informó de que no existen pistas en torno a la desaparición y que los investigadores que llevan el tema "no dicen nada para no estorbar". Por ello, abogó por "tener paciencia" y confió en "el buen trabajo de estos profesionales para que tengan éxito".

En cuanto al clima que existe en el pueblo, recordó que ya han habido varias concentraciones en la plaza principal de la localidad y que "seguirán habiéndolas". "Los vecinos están desmoralizados", aseguró, a la vez que quiso animarles a "confiar en que todo termine con un final feliz", según especificó en declaraciones a Europa Press.

Por su parte, añadió que la familia del menor, que era hijo único, ya han necesitado dos veces la atención de un equipo de psicólogos de Diputación y de Cruz Roja.

En estos momentos la investigación se centra también fuera del pueblo. Además, se están atendiendo todas las llamadas que puedan aportar alguna pista sobre el paradero del menor y se están verificando el grado de certeza. Así, el primer edil aseguró que las llamadas recibidas a través de la Policía Local, unas seis, según concretó, se han puesto a disposición de la Guardia Civil.